El d¨®lar cambi¨® a 114 pesetas en la primera sesi¨®n 'libre'

El d¨®lar cambi¨® ayer en Madrid a 114,007 pesetas, pr¨¢cticamente igual que el d¨ªa anterior, en la primera sesi¨®n en la que el Banco de Espa?a no fij¨® cambios de compra o venta de divisas al inicio de la jornada. La liberalizaci¨®n del mercado de divisas no tuvo repercusiones especiales en el tipo de cambio de la peseta, tampoco era normal que ocurriera lo contrario ya que el banco emisor va a seguir interviniendo a lo largo de las sesiones y la evoluci¨®n de la divisa espa?ola se ajust¨® a la tendencia que se est¨¢ imponiendo ¨²ltimamente.El nuevo mecanismo, instaurado ayer, muestra pocas diferencias, aunque algunas son significativas, con el sistema vigente hasta ahora. Antes, el Banco de Espa?a hac¨ªa p¨²blico, al inicio de la sesi¨®n, el tipo de cambio al que se compromet¨ªa a comprar o vender divisas. Este tipo de cambio de intervenci¨®n pod¨ªa modificarse a lo largo de la sesi¨®n en la medida en que los responsables del banco emisor consideraran que se estaba inclinando el tipo de cambio en exceso hacia una apreciaci¨®n o hacia una apreciaci¨®n de la peseta que pudiera entrar en contradici¨®n con los objetivos de cambio de la divisa espa?ola. En estas condiciones, casi r¨ªgidas, los operadores del mercado de divisas pod¨ªan realizar movimientos en monedas extranjeras con riesgos pr¨¢cticamente nulos.

A partir de ayer el Banco de Espa?a no fija una posici¨®n inicial y, por lo tanto, no adquiere un compromiso de compra o venta de divisas. Pero, como los objetivos de tipo de cambio de la peseta se mantienen, el Banco de Espa?a intervendr¨¢ -comprando o vendiendo- cuando considere que es necesario. De hecho, ayer, el Banco de Espa?a compr¨¦ divisas por un importe equivalente a algo m¨¢s de 217 millones de d¨®lares. La diferencia esencial entre el nuevo mecanismo y el antiguo es que los operadores no estar¨¢n seguros de que sus operaciones podr¨¢n ser compensadas en el Banco de Espa?a que, cuando intervenga, lo har¨¢ a los precios que m¨¢s le convenga.