El vicio de la abundancia
Televisi¨®n Espa?ola tiene previsto emitir hoy la final de la Copa Korac de baloncesto, a la que han llegado el Real Madrid y la Cibona de Zagreb. Durante los ¨²ltimos meses hemos podido asistir como espectadores televisivos a toda la fase de clasificaci¨®n del torneo, pero, pese a ello, el m¨¢s importante enfrentamiento de la competici¨®n fue retransmitido ¨²nicamente por el canal auton¨®mico gallego en el encuentro de ida y se ofrecer¨¢ en el de vuelta gracias a un extra?o acuerdo en el que la televisi¨®n yugoslava ha ignorado su acuerdo previo de reciprocidad con el canal auton¨®mico gallego.La retransmisi¨®n, una vez m¨¢s, se ha planificado de forma apresurada tras el esc¨¢ndalo que supuso la no emisi¨®n para toda Espa?a del partido de ida jugado en Madrid. El oportunismo econ¨®mico del Real Madrid y la mala gesti¨®n del ¨¢rea deportiva de TVE lo impidi¨®, pese a que las cantidades econ¨®micas que se barajaban para el acuerdo eran sensiblemente inferiores a las que se han abonado en otros acontecimientos deportivos recientes; baste recordar los casi 80 millones pagados en alg¨²n mi¨¦rcoles europeo de f¨²tbol.
El caso del baloncesto
El ejemplo de la pol¨ªtica deportiva respecto al baloncesto es uno de los m¨¢s significativos que pueden observarse en TVE. La oferta de retransmisiones es muy elevada y casi no hay competici¨®n alguna que quede fuera de cobertura, incluida la liga profesional norteamericana. La intensa difusi¨®n de este deporte en TVE contrasta con casos como el citado o con la evidente contradicci¨®n que supone tener contratado como comentarista al seleccionador de baloncesto, Antonio D¨ªaz Miguel, y sin embargo no tener los derechos de retransmisi¨®n de los partidos de la selecci¨®n en la Copa de Europa.Como argumento de disculpa cabe esgrimir el recurso a la abundancia. La decisi¨®n de Pilar Mir¨® y su equipo de dedicar TVE-2 a retransmisiones de todo tipo, en particular deportivas, ha derivado en el vicio de la abundancia. Se da casi todo y a veces con dudosos criterios de inter¨¦s. En la reciente cobertura de Calgary hemos podido asistir a la emisi¨®n a horas intempestivas de eventos que carec¨ªan del m¨¢s m¨ªnimo inter¨¦s para cualquier aficionado espa?ol. Se dio casi un centenar de horas de emisi¨®n, pero, no se pudo ver en directo el minuto m¨¢s importante de la competici¨®n, cuando Blanca Fern¨¢ndez Ochoa consigui¨® colocarse en primera posici¨®n del eslalon gigante.
El espejismo de la abundancia puede crear la ficci¨®n de que se ha conseguido una magn¨ªfica cobertura deportiva. Sin embargo, valdr¨ªa la pena recapacitar desde los conceptos de calidad y de oportunidad. De poco sirve dar un centenar de horas de Calgary si la prueba m¨¢s importante no puede verse en el instante adecuado. De poco sirve inundar la programaci¨®n de partidos de baloncesto y luego tener que recurrir a apa?os de ¨²ltima hora para atender a los acontecimientos de aut¨¦ntica trascendencia De poco sirve elaborar magn¨ªficos trabajos, como algunos de los reportajes realizados por el equipo de enviados especiales a Calgary, si se, ofrecen a mala hora y Sin promoci¨®n alguna. All¨ª se ofrecieron valiosos documentos informativos, como aquel en el que la desventura de Blanca Fern¨¢ndez Ochoa estaba captada por las c¨¢maras de Televisi¨®n Espa?ola hasta el ¨²ltimo detalle. La fuerza de las im¨¢genes exclusivas -que terminaban con Blanca llorando sobre los hombros de la entrevistadora- contrastaron con el pobre hueco en el que se ofrecieron.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.