Justa reivindicaci¨®n profesional
Todos los d¨ªas vemos y o¨ªmos en los medios de comunicaci¨®n, e incluso, recientemente, en el Congreso de los Diputados, con motivo del debate sobre el estado de la naci¨®n, las cr¨ªticas sobre el deterioro y desprestigio de la justicia. Yo me pregunto si desde el ministerio e incluso desde el Consejo General del Poder Judicial se pone el inter¨¦s que el caso requiere para prestigiarla y para ello empezaremos por las peque?as cosas; veamos: para el ingreso en el Cuerpo Superior de Polic¨ªa hasta el a?o cincuenta y tantos no se exig¨ªa titulaci¨®n alguna, hoy se exige, creo, graduado de universidad o tres cursos de facultad; los carteros urbanos hoy no se denominan como tales, sino auxiliares de la escala de reparto, exigi¨¦ndoseles para su ingreso la titulaci¨®n de graduado escolar o bachiller elemental; a los agentes de tributos del Ministerio de Hacienda, la titulaci¨®n de bachiller superior; a los oficialles y auxiliares de la Administraci¨®n de justicia, que hasta el a?o 1947 no ten¨ªan la condici¨®n de funcionarios p¨²blicos, se les exige, respectivamente, la titulaci¨®n de bachiller superior y elemental.El alguacil (hoy agente judicial), del ¨¢rabe aluacir, equivalente a lugarteniente, que entre otras funciones ten¨ªa la facultad de nombrar gobernadores de comarca; el funcionario m¨¢s antiguo de la Administraci¨®n, que en los pa¨ªses m¨¢s desarrollados de Europa mantiene todo el prestigio de tiempos pret¨¦ritos, as¨ª vemos en comisiones rogatorias: "El alguacil de la corte del gran ducado de Luxemburgo", "el alguacil de la canciller¨ªa real" (de la ciudad que corresponda de B¨¦lgica), etc¨¦tera.
En Espa?a, al agente judicial las leyes vigentes todav¨ªa le reservan una serie de funciones t¨¦cnicas y de gran responsabilidad: juicios ejecutivos, diligencias de lanzamiento en juicios de desahucio, intervenci¨®n del caudal hereditario en los juicios ab intestato, en interdictos, toda clase de notificaciones, citaciones, emplazamientos y requerimientos, otorgar la posesi¨®n en ejecuci¨®n de sentencias, diligencias en muchas de las cuales lleva la delegaci¨®n del juez, asistido del secretario para dar fe, pero que las decisiones sobre el terreno habr¨¢ de tomarlas el agente judicial. Tiene adem¨¢s la condici¨®n de agente de la autoridad. Pues bien, pese a todo ello, y a que la sentencia del Tribunal Constitucional n¨²mero 99-77 declara inconstitucional el art¨ªculo 15, entre otros, de la Ley 30/84, de medidas de reforma de la funci¨®n p¨²blica en relaci¨®n con el proyecto de modificaci¨®n de dicha ley, se reservan a¨²n funciones subalternas a los agentes judiciales, entre ellas porteos.
Recientemente se han convocado oposiciones para ingreso en el Cuerpo de Agentes Judiciales de la Administraci¨®n de Justicia, y se dice: "No se exige t¨ªtulo". Nos preguntamos si hoy d¨ªa, por imperativo de las leyes de educaci¨®n, se exige la escolarizaci¨®n hasta los 16 a?os, lo que conlleva que todo ciudadano tendr¨¢ por lo menos el bachillerato elemental, ?se convoca esta oposici¨®n para los que no vayan al colegio?
Qu¨¦ concepto tan serio ten¨ªa el Rey Sabio de la justicia y de la funci¨®n a desempe?ar por el alguacil en sus Partidas al decir que el "alguacil ha de ser de buen linaje y saber leer y escribir"; pi¨¦nsese que en aquella ¨¦poca hab¨ªa reyes que no sab¨ªan hacerlo.
Piensen, se?or¨ªas, qu¨¦ flaco servicio puede hacerle a la justicia si el funcionario que lleva la delegaci¨®n del juez o presidente del tribunal no est¨¢ dotado de la preparaci¨®n adecuada para desempe?ar tan delicada funci¨®n, o si un momento antes le ven de porteador. Por todo ello, y aunque nada m¨¢s sea como agravio comparativo, entendemos que el agente judicial es un funcionario t¨¦cnico y que ha de exig¨ªrsele el bachillerato superior y con el nivel correspondiente a esta titulaci¨®n.- Jos¨¦ Carballido Mateo
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