Oreja asegura que hay que renovar el di¨¢logo Norte- Sur
"El di¨¢logo y la cooperaci¨®n entre el Norte y el Sur han perdido prioridad en el debate p¨²blico europeo" dice el secretario general del Consejo de Europa, el espa?ol Marcelino Oreja. "Por obligaci¨®n moral y necesidad racional" a?ade, "nos proponemos renovarlo".
La campa?a emprendida el pasado febrero por el Consejo sobre la interdependencia y la solidaridad Norte-Sur pretende, seg¨²n Oreja, "recordarnos a todos que vivimos en una sociedad mundial". Y a?ade: "Europa, que tiene una larga tradici¨®n en el respeto y perfeccionamiento de los valores de la libertad y el respeto a los derechos humanos, no puede dejar de lado la solidaridad internacional", asegura el m¨¢ximo ejecutivo del Consejo de Europa, que realiz¨® la semana pasada su primera visita oficial a Espa?a, en el marco de una gira que incluye los 21 pa¨ªses miembros de la instituci¨®n.El Consejo ha programado decenas de concursos, mesas redondas, actos culturales y de todo tipo en el marco de esta campa?a, que finalizar¨¢ en los primeros d¨ªas de junio con una gran conferencia internacional en Madrid. El objetivo central, dice Oreja, "es poner el tema de las relaciones Norte-Sur en el primer plano de la discusi¨®n p¨²blica, en las prioridades de los gobernantes y en la conciencia de las sociedades europeas".
Tras jugar un importante papel en el establecimiento de un di¨¢logo permanente Este-Oeste, el Consejo pretende ahora dotar de una estructura similar al di¨¢logo Norte-Sur.
"Cada d¨ªa mueren 40.000 ni?os en el Sur, mientras que Am¨¦rica Latina ha transferido al Norte en los ¨²ltimos cinco a?os, por pago de intereses de la deuda externa, 150.000 millones de d¨®lares (17,2 billones de pesetas), m¨¢s del doble de lo que represent¨® el Plan Marshall", recuerda. "Nosotros", a?ade Marcelino Oreja, "no tenemos recetas ni soluciones, pero s¨ª podemos hacer conciencia en Europa de esta situaci¨®n de desigualdad estructural y poner de relieve nuestra responsabilidad, como europeos, en el mantenimiento de esta realidad injusta".
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