Multitudinario entierro de la surafricana Dulcie September
Miles de personas se concentraron ayer ante la entrada principal del cementerio parisiense del P¨¨re Lachaise para despedir los restos mortales de Dulcie September, dirigente y representante para Europa del Congreso Nacional Africano (ANC), movimiento opositor al r¨¦gimen racista de Pretoria, asesinada en Par¨ªs el 29 de marzo.
El ¨²nico pol¨ªtico franc¨¦s que habl¨® desde la tribuna de oradores fue el secretario general del Partido Comunista Franc¨¦s, Georges Marchais, que exigi¨® el boicoteo total al r¨¦gimen racista de Sur¨¢frica.Numerosas delegaciones de pa¨ªses africanos y de movimientos de liberaci¨®n asistieron al sepelio. Dos representantes del presidente de la Rep¨²blica y uno del Partido Socialista visitaron la sala mortuoria, instalada en la Casa de los Metal¨²rgicos, pero se negaron a asistir a un acto en el que los comunistas franceses consiguieron situarse en primera fila, ante la estupefacci¨®n de numerosos militantes antiapartheid franceses que no pertenecen a este partido.
Los c¨¢nticos y danzas africanos, los gritos rituales de despedida a la dirigente asesinada, las numerosas banderas rojas y negras y del Congreso Nacional Africano, y el canto del Nkosi sikeleli Africa (Dios salve ?frica), tradicional himno del nacionalismo negro, fueron los signos externos de una concentraci¨®n cargada de emoci¨®n y de significado pol¨ªtico.
Los comunistas exigen la ruptura de relaciones con Sur¨¢frica, mientras que, el presidente de la Rep¨²blica, Fran?ois Mitterrand, ha se?alado que la ausencia de delegaci¨®n francesa en Pretoria puede impedir la efectividad de los esfuerzos humanitarios de Par¨ªs.
La polic¨ªa francesa no cuenta todav¨ªa con ninguna pista fiable sobre la autor¨ªa del asesinato de Dulcie September. Seis personas a las que se interrog¨® a lo largo de la semana fueron puestas en libertad sin cargos el viernes.
Las principales organizaciones antiapartheid acusan al r¨¦gimen de Pretoria y se?alan al mismo tiempo la responsabilidad del Gobierno conservador franc¨¦s por la falta de custodia y las escasas precauciones tomadas alrededor de la dirigente surafricana asesinada.
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