Espa?a estudia la suspensi¨®n de importaciones de uranio procedente de Namibia
El Gobierno espa?ol estudia la suspensi¨®n, para este mismo a?o, de las importaciones de uranio enriquecido procedentes de Namibia, seg¨²n dijo ayer el secretario de Estado de Cooperaci¨®n Internacional y para Iberoam¨¦rica, Luis Y¨¢?ez. Igualmente, el Gobierno prepara una lista de sanciones contra el r¨¦gimen racista de Sur¨¢frica, dijo Y¨¢?ez, para quien nuestro pa¨ªs es uno de los que m¨¢s escrupulosamente cumple con el bloqueo al r¨¦gimen del apartheid que practica Johanesburgo.
La enfermedad del ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, operado ayer, hizo que fuese Y¨¢?ez -y no el ministro de Relaciones con las Cortes como se anunci¨® inicialmente- quien compareciese ayer ante la Comisi¨®n de Exteriores del Congreso de los Diputados. Las relaciones de Espa?a con Sur¨¢frica acapararon la. mayor parte de la sesi¨®n, y Y¨¢?ez asegur¨®, entre otras cosas, que nuestro pa¨ªs trata de coordinarse con los restantes estados de la Comunidad Europea para embargar las compras de carb¨®n surafricano, que, en cualquier caso, se reduce cada a?o."Estamos reduciendo progresivamente las importaciones de carb¨®n y buscamos suministros alternativos, por ejemplo en China y Polonia, aunque sean M¨¢s caros y de peor calidad". Respecto de la importaciones de uranio de Namibia, Y¨¢?ez dijo que el contrato data de 1974, y que fue renovado por primera vez en 1978, siendo ministro de Industria Agust¨ªn Rodr¨ªguez Sahag¨²n, quien precisamente ayer present¨® una pregunta sobre el tema en la comisi¨®n.
Y¨¢?ez se excus¨¦ diciendo que las compras de uranio a Namibia, desaconsejadas aunque con car¨¢cter no vinculante por las Naciones Unidas, no se realizan directamente, sino a trav¨¦s de una empresa brit¨¢nica y asegur¨® que la resistencia namibia del Swapo "ha agredecido al Gobierno espa?ol su actitud".
El secretario general de pol¨ªtica exterior del Ministerio de Exteriores, Fernando Perpi?¨¢ Robert, que tambi¨¦n compareci¨® ante la comisi¨®n, calific¨® de "tensas" y "dif¨ªciles" las relaciones con Sur¨¢frica, especialmente desde 1986 cuando fue expulsado de Madrid el consejero militar. Los embargos de exportaciones e importaciones de armamento militar, el "desalentar" actos culturales y cient¨ªficos, la suspensi¨®n de exportaciones petrol¨ªferas y de importaciones de monedas de oro y siderurgia, fueron citados por Perpi?¨¢ como algunas de las sanciones que ya se aplican a Sur¨¢frica. Junto a ello Y¨¢?ez anunci¨® que a partir del pr¨®ximo mes de noviembre las l¨ªneas a¨¦reas surafricanas no aterrizar¨¢n m¨¢s en suelo espa?ol y el secretario de Estado y el secretario general detallaron si habr¨¢ nuevas medidas contra el r¨¦gimen racista en el caso de que ¨¦ste lleve a cabo la aplazada ejecuci¨®n en la horca de seis negros, conocidos como el grupo de Sharpeville. Tambi¨¦n anunci¨® la "buena disposici¨®n" del Gobierno para facilitar la instalaci¨®n en Madrid de una oficina del Congreso Nacional Africano, principal grupo de oposici¨®n al r¨¦gimen racista.
Ni centristas ni comunistas se mostraron satisfechos de estas explicaciones. El diputado de IU, Gerardo Iglesias, lleg¨® a afirmar que el Gobierno espa?ol, "apoya la esclavitud" con su "pol¨ªtica de dos caras" en lo concerniente a la compra de carb¨®n a Sur¨¢frica". Iglesias, que pidi¨® el corte total de relaciones con el r¨¦gimen de Pieter Botha, fue replicado por Y¨¢?ez, quien asegur¨® que el arzobispo surafricano Desmond Tutu, no solicit¨®, durante su paso por Madrid, una completa ruptura diplom¨¢tica con el r¨¦gimeen de Johanesburgo.
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