Boxall se afianzo como l¨ªder del torneo de Espa?a

, El ingl¨¦s Richard Boxall se afianz¨® ayer al frente del torneo de Espa?a de golf, en Pedre?a (Cantabria) al concluir el segundo recorrido en 64 golpes, con lo que totaliza 127, 13 bajo par. Jos¨¦ Avelino Cabo, que entreg¨® la mejor tarjeta (631 es el primer espa?ol clasificado (el 14?, con 136). Severiano Ballesteros evit¨®, con sus 139 (72 y 67), el bochorno de no superar el corte ante sus paisanos y a¨²n conf¨ªa en que la competici¨®n cambie de signo. El gal¨¦s lan Woosnam qued¨® fuera de ella.

El circuito europeo de 1988 est¨¢ deparando bastantes sorpresas. Si Ballesteros venci¨® en Mallorca, el surafricano Mark McNulty en Cannes (Francia) y el alem¨¢n occidental Bernhard Langer en Epson (Reino Unido), los hasta ahora desconocidos David Whelan y Dereck Cooper, ingleses; David Llewellyn, gal¨¦s, y Mike Harwood, australiano, se impusieron, respectivamente, en Barcelona, Madrid, Biarritz (Francia) y Quinta do Lago (Portugal). Y Boxall parece decidido a emularlos en este campo que reune, como ¨¦l dice, "muchos trucos". A sus 27 a?os, no hab¨ªa subido m¨¢s que hasta una novena plaza, en la reciente prueba lusitana, y en 1987 fue el 762 en el ranking continental. Pero ayer sum¨¦ siete birdies, cuatro de ellos consecutivos -en los hoyos 14, 15, 16 y 17-.Ansia de desquito

Como era l¨®gico, Ballesteros eludi¨® el desastre de su eliminaci¨®n, pero no satisfizo su ansia de desquite. Es cierto que sus 72 de la v¨ªspera se redujeron a 67 -cinco birdies y dos bogeys- No obstante habr¨ªan podido quedarse en 64. Y es que, a pesar de su comienzo inseguro y de su nuevo fallo en el 2, en el que no consigui¨® salvar el par despu¨¦s de que la pelota hubiera ca¨ªdo en un lugar muy comprometido de un bunker, su andadura fue buena.Para ser mejor, si no ¨®ptima, le sobr¨® su putt de un metro desperdiciado en el 15 y su fatalidad en el 18, en el que su posible birdie se convirti¨® en un bogey.

El c¨¢ntabro hab¨ªa embocado la bola desde unos cinco metros en el 16. Luego, en el ¨²ltimo, la situ¨® a¨²n m¨¢s cerca del agujero. Apenas un palmo separaba la suya de la de su compa?ero de partido Ken Brown. La diferencia estuvo en que el escoc¨¦s, uno de los jugadores m¨¢s parsimoniosos -"ojal¨¢ yo tuviera a veces algo de su calma"- ironiz¨® Ballesteros en la sala de Prensa acaso recordando que en un green no se hab¨ªa resistido a comentar con su caddie que su lentitud era exasperante-, cogi¨® el putter con frialdad, acarici¨® su cabeza, se pase¨® de aqu¨ª para all¨¢ escudri?ando el terreno y, al fin, efectu¨® un lanzamiento casi perfecto y la pelota dej¨® de rodar justamente la borde del orificio. Una contrariedad, s¨ª, pero m¨ªnima, ya que, al menos, cerr¨® su serie con un par y 66 -seis birdies y dos bogeys-. Severiano, sin embarg¨®, se pas¨® en su tiro y, molesto consigo mismo por el birdie perdido, tambi¨¦n calcul¨® mal el siguiente. "Se me ha fastidiado el d¨ªa", se lament¨®. De inmediato, eso s¨ª, se consol¨® bromeando: "Bien; voy a jugar este fin de semana, ?no?". El fantasma del fiasco se hab¨ªa esfumado.

Clasiricaci¨®n: 1? Broxall (Inglaterra), 127; 2? James (Inglaterra), 131; 3? Brown y Montgomerie (Escocia), O'Connor (Irlanda), Willimas (Inglaterra) y Clayton (Australia), 133; 9? Faldo (Inglaterra), 135; 14? Cabo, 136; 19? Olaz¨¢bal, Rivero y Mart¨ªn, 137; 29? Pi?ero, 138; 34? Severiano Ballesteros, 139.