Butrague?o reconoce que necesita m¨¢s que nunca la suerte para acabar con las ¨²ltimas cr¨ªticas
Emilio Butrague?o considera que necesita esta vez de la suerte "m¨¢s que nunca", porque es consciente de atravesar una fase decisiva en su carrera. "Estoy en una situaci¨®n especial; todo el equipo est¨¢ recibiendo cr¨ªticas, pero quiz¨¢ yo, de manera particular, muy duras. En su momento hubo un exceso de halagos y se crearon expectativas irreales sobre mi juego, y lo de ahora s¨®lo puedo solucionarlo en el campo". Su mal momento aumenta las expectativas sobre su rendimiento y el de la selecci¨®n espa?ola en la Eurocopa que se inicia ma?ana.
"Yo s¨®lo aceptar¨ªa ser suplente de Butrague?o". La frase corresponde a un futbolista italiano, el delantero del Inter Sandro Altobelli. La dijo tras una serie de pruebas en las que el seleccionador, Azeglio Vicini, le excluy¨® del equipo. Pero mientras eso ocurre fuera, en el entorno del equipo espa?ol la irregularidad de Butrague?o suscita controversias, que, ¨²ltimamente, han estado acompa?adas hasta de gestos bien visibles en el campo por parte de algunos compa?eros."S¨ª, es cierto que he hablado con Michel", comenta Butrague?o. "Me hab¨ªan dicho que M¨ªchel estaba enfadado conmigo porque yo jugaba demasiado mal, pero me lo ha aclarado y no hay nada anormal, Lo que ocurre es que si nos siguiese una c¨¢mara a cada jugador durante los 90 minutos, mucha gente se escandalizar¨ªa. Los futbolistas nos chillamos mucho en el campo porque es una forma de desahogar la tensi¨®n por un fallo o un pase mal dado".
Elogios
Aclarado esto, queda por definir c¨®mo jugar¨¢ Butrague?o en esta Eurocopa. Las opiniones p¨²blicas de sus compa?eros son, por lo general, de corte italiano. As¨ª, Mart¨ªn V¨¢zquez, compa?ero de quinta, parece tenerlo muy claro: "?Emilio? Se va a destapar. Los acontecimientos importantes se le dan bien, y deja a todo el mundo con la boca abierta". Y Tom¨¢s, el lateral del Atl¨¦tico de Madrid que se ha enfrentado a ¨¦l varias veces, opina: "Es un jugador muy h¨¢bil, tiene gotas geniales y puede estar m¨¢s o menos bien en un partido, pero en cualquier momento, ¨¦l lo resuelve todo en una jugada".?Y qu¨¦ opina su pareja de baile? Jos¨¦ Mari Bakero, el delantero de la Real Sociedad, tiene este criterio: "Butrague?o es un jugador genial. ?Que no est¨¢ fino? Esperemos que a partir de ahora lo est¨¦. Butrague?o juega distinto, puede hacer cualquier cosa y es imprevisible y dif¨ªcil de parar cerca del ¨¢rea. Dentro de ella realiza acciones que tambi¨¦n parecen f¨¢ciles, pero que resultan muy complicadas de poner en pr¨¢ctica. El Buitre hace mucho da?o a cualquier defensa que le marque".
Bakero parece entenderse, pues, con el madridista de gotas geniales. Y lo curioso es que ambos son completamente distintos en su forma de concebir el f¨²tbol. Si Butrague?o asume a la perfecci¨®n el papel de prestidigitador capaz de sacar jugadas inveros¨ªmiles de sus botas, el donostiarra se considera "un trabajador del f¨²tbol que cree en el juego al primer toque, de presi¨®n y movimientos constantes".
Butrague?o aguanta el bal¨®n, lo esconde, lo mima y salta disparado; eso s¨ª, cuando est¨¢ bajo los efectos de la inspiraci¨®n. Jos¨¦ Mari suele recibirlo de espaldas, lo protege con su cuerpo y lo devuelve al primer toque. Parad¨®jicamente, ambos tienen un punto en com¨²n, sus piernas con unos gemelos muy fuertes, mucho m¨¢s voluminosos a¨²n los del donostiarra, pero que les permite a los dos realizar cambios bruscos de movimientos y en carrera a gran velocidad. "Cuanto m¨¢s abajo tienes el punto de gravedad, m¨¢s facilidad encuentras para realizar ese tipo de movimientos imprescindibles para desbordar a los defensas", explica Bakero, el nuevo delantero del Barcelona.
Mientras tanto, Butrague?o escucha cr¨ªticas a su alrededor en voz baja, oye lo que le comentan algunos compa?eros, otea el horizonte y conf¨ªa tanto en su facilidad con el bal¨®n como en la suerte. "M¨¢s que nunca necesito tener un poco de suerte, estoy en una situac¨ª¨®n especial, porque las cr¨ªticas son muy duras, aunque yo las acepto, porque as¨ª es el f¨²tbol y la vida misma", dice Butrague?o. "Pero todo este foll¨®n, por llamarlo as¨ª, puedo acabarlo ¨²nicamente en el campo. Y la verdad es que casi siempre me han salido bien las cosas cuando m¨¢s lo necesitaba", concluye el jugador madridista.
Butrague?o considera que est¨¢ pagando el exceso de elogios hacia su persona recibidos en el pasado: "En su momento hubo un exceso de halago, se crearon expectativas irreales sobre mi juego, aunque ahora, con 24 a?os, y m¨¢s experiencia estoy en condiciones de mejorar todo lo que hago. Si al final las cosas no salen como yo espero, tampoco ser¨¢ cosa de que me entre una depresi¨®n. Ya tuvimos todos los madridistas una muy fuerte, la m¨¢s terrible de los ¨²ltimos a?os, cuando nos elimin¨® el PSV Eindhoven en las semifinales de la Copa de Europa".
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