Pinochet anuncia el fin del exilio chileno

El general Augusto Pinochet anunci¨® ayer que los 430 exiliados por el r¨¦gimen militar podr¨¢n retornar al pa¨ªs, incluyendo a 177 personas que sufren condena judicial de extra?amiento. Pero estas ¨²ltimas deber¨¢n presentarse al regresar al pa¨ªs ante los tribunales para que revisen su situaci¨®n legal. La medida abarca asimismo a los chilenos que han sido privados de su nacionalidad, seg¨²n fuentes gubernamentales.

La primera exiliada que ten¨ªa previsto volver, al amparo de esta medida, fue Isabel Allende, hija menor del derrocado presidente Salvador Allende. Isabel tom¨® ayer un avi¨®n que la condujo de Buenos Aires a Santiago donde alrededor de 200 personas, dirigentes pol¨ªticos y de organismos de derechos humanos, la esperaron y le dieron la bienvenida. "Tengo derecho a vivir en mi pa¨ªs", se?al¨® al pisar la capital chilena. Los asistentes, que portaban banderas de los partidos de izquierda, rindieron homenaje a la memoria de Salvador Allende.Por su parte, Hortensia Bussi, viuda de Allende, dijo desde Ciudad de M¨¦xico: "Me cuesta creerlo. Varias veces me han anunciado que puedo volver y no ha sido efectivo". Con su voz entrecortada por sollozos agreg¨®: "Volver¨¦ lo m¨¢s pronto posible por la puerta ancha".

[En declaraciones a Radio Nacional de Espa?a, la viuda de Allende precis¨® que no volver¨ªa a su pa¨ªs antes del 11 de este mes y dijo: "S¨®lo un gran fraude puede impedir el triunfo del no frente a Pinochet"].

Aunque inicialmente el r¨¦gimen no incluy¨® en la medida anunciada ayer a las 177 personas con condena judicial -el resto permanece exiliado por decisi¨®n administrativa-, en la tarde de ayer el Ministerio del Interior inform¨® que tambi¨¦n estaban considerados, lo mismo que los chilenos que han sido privados de su nacionalidad, que podr¨¢n recurrir esa medida. En ese caso se halla, entre otros, el dirigente del Partido Radical y de la Internacional Socialista Anselmo Sule.

200.000 fuera de su pa¨ªs

Pero el exilio econ¨®mico y pol¨ªtico afecta a muchas personas m¨¢s. Fuentes de organismos de derechos humanos elevan a m¨¢s de 200.000 chilenos el n¨²mero de los que se han ido para no vivir bajo la dictadura, aunque a ellos no se les imped¨ªa regresar.

Entre los exiliados m¨¢s famosos se encuentra, adem¨¢s de los familiares de Allende, el secretario general del Partido Comunista, Luis Corval¨¢n, y el ex secretario general del Partido Socialista Carlos Altamirano. La Iglesia cat¨®lica se felicita por la medida y los dirigentes opositores consideraron que era un triunfo de la presi¨®n para que finalizara este castigo que comenz¨® desde el golpe militar de 1973.

La oposici¨®n y la Iglesia ea t¨®lica hab¨ªan pedido infatigablemente el t¨¦rmino del exilio durante a?os. Pero el r¨¦gimei s¨®lo entreabri¨® las puertas, dando durante cuatro a?os listas parciales de autorizados para regresar. Algunos exiliados, entre ellos el ex vicepresidente Clodomiro Almeyda, quien est¨¢ encarcelado desde hace m¨¢s de un a?o, regresaron clandestinamente.

Pero Pinochet esper¨® hasta la v¨ªspera del plebiscito, cuando debe ganar votos en su intento de perpetuar el r¨¦gimen, para hacer este anuncio, intentando revestir con una m¨¢scara de liberalizaci¨®n el per¨ªodo previo al refer¨¦ndum, aunque el r¨¦gimen mantiene sus caracter¨ªsticas. Pinochet aspira a gobernar hasta 1997 y desde que es candidato ha realizado un h¨¢bil giro t¨¢ctico. Intenta atraer a los indecisos, de 10 a 20% de la masa de votantes, demostrando que ¨¦l puede encabezar una transici¨®n otorgando algunas garant¨ªas.

En la noche del mi¨¦rcoles, el general Pinochet intervino por televisi¨®n con un mensaje ins¨®lito. Vestido de terno azul y corbata roja, se dirigi¨® a los "compatriotas y opositores" y en un tono inusualmente moderado hizo un llamamiento a estos ¨²ltimos para integrarse en la institucionalidad, "que se enriquecer¨¢ en la discrepancia y en leg¨ªtimo pluralismo". Una semana antes, el Gobierno suspendi¨® la vigencia de los dos estados de excepci¨®n que rigieron durante los ¨²ltimos 15 a?os la vida del pa¨ªs.