La 'perestroika' en la Prensa sovi¨¦tica
Egor YakovIev, director de 'Novedades de Mosc¨²', acaba de ganar una batalla pol¨ªtica a la agencia oficial Novosti
Egor Yakovlev, el director de Novedades de Mosc¨², acaba de ganar una batalla pol¨ªtica que ha estado a punto de costarle el puesto al frente de uno de los dos semanarios m¨¢s atrevidos de la URSS. El conflicto, que ilustra sobre las tensiones de la apertura informativa en la URSS, ha enfrentado a Egor Yakovlev con la agencia de prensa Novosti, una de las entidades participantes en el grupo editor de Novedades de Mosc¨².
"Hubo enfrentamientos con la agencia Novosti que afectaban a mi subdirector, contra el cual se hab¨ªan formulado quejas que yo consideraba injustas. Por ello dije que si no pod¨ªa defender el buen nombre de esa persona, tampoco pod¨ªa seguir trabajando", se?ala Yakovlev en una entrevista con EL PA?S". "Creo que consegu¨ª lo que quer¨ªa; por eso me quedo aqu¨ª", afirma el director, que interrumpe repetidamente la conversaci¨®n para atender las llamadas telef¨®nicas. "S¨®lo cojo el tel¨¦fono del Kremlin", asegura, a modo de disculpa.Yakovlev present¨® su dimisi¨®n por el cese de Yuri Bandura, el subdirector que le hab¨ªa reemplazado durante sus vacaciones veraniegas. Dos art¨ªculos revisados por Bandura durante esta sustituci¨®n -uno sobre el himno nacional sovi¨¦tico y otro sobre Yuri Churbanov, el yerno de Breznev actualmente procesado- causaron malestar en la agencia Novosti, cuyo presidente, Valent¨ªn Falin, tom¨® cartas en el asunto para destituir a Bandura, seg¨²n aseguran fuentes bien informadas. Falin, se?alan estas fuentes, dejar¨¢ pronto la presidencia de Novosti para trabajar en el aparato del comit¨¦ central.
Yakovlev no quiere entrar en detalles sobre las tensiones con Novosti, la agencia de prensa que, con un marcado componente de propaganda, se orienta hacia una clientela internacional "Yo tengo muy mal car¨¢cter, y. cuando estoy en la Redacci¨®n no dejo entrar a nadie, pero cuando no estoy, la Novosti, en su calidad de casa editora, gusta de in miscuirse".
Iras de los conservadores
Durante varios d¨ªas, la dimisi¨®n de Yakovlev asust¨® a quienes ven en Novedades de Mosc¨² un s¨ªmbolo a¨²n fr¨¢gil de un nuevo tipo de Prensa, m¨¢s libre y cr¨ªtica que la de anta?o. Varias semanas antes, el mismo p¨²blico se hab¨ªa alarmado ante el intento de enviar a Vitali Korotich, el director de Ogoniok, como representante sovi¨¦tico a la Unesco. Korotich dijo a esta corresponsal que ha b¨ªa rechazado tal oferta. Tanto Ogoniok como Novedades de Mosc¨², objeto de las iras de los sectores m¨¢s conservadores de la sociedad, sufrir¨¢n el a?o pr¨®ximo la limitaci¨®n de suscripciones de,cidida por las autoridades con el pretexto de la falta de papel.
Novedades de Mosc¨² depende tambi¨¦n de las sociedades de amistad y relaciones culturales con los pa¨ªses extranjeros. Ello impone a Yakovlev unas servidumbres de las que parece estar m¨¢s libre Korotich. As¨ª, por ejemplo, el pasado verano, con ocasi¨®n del 20? aniversario de la invasi¨®n de Praga por los carros de combate del Pacto de Varsovia, Novedades de Mosc¨² prepar¨® una mesa redonda sin precedentes, en la cual interven¨ªan varios ex corresponsales y funcionarios sovi¨¦ticos que hab¨ªan estado en Praga en 1968.
Por aquellos d¨ªas, no obstante, un alto funcionario comunista se negaba a hacer ninguna declaraci¨®n sobre el tema, asegurando que Ligachov hab¨ªa prohibido abordarlo. La mesa redonda, no obstante, se llev¨® a cabo. "Yo estaba de viaje, y uno de los jefes de Novosti ley¨® el material e hizo los recortes que le pareci¨®. En las versiones extranjeras, el texto sali¨® recortado, pero en la versi¨®n rusa volvimos a restablecer los p¨¢rrafos suprimidos. Son cosas que pasan cuando estoy yo".
Egor Yakovlev, que tiene 58 a?os y es miembro del partido desde 1953, ha defendido su posici¨®n personal en un art¨ªculo titulado Disciplina y obediencia Yakovlev reivindica la "disciplina de unas nuevas relaciones democr¨¢ticas frente a la disciplina de la falta de transparencia". Reivindica tam bi¨¦n la insumisi¨®n como elemento que hace posible el progreso.
Egor Ligachov, el miembro del Politbur¨® y secretario del comit¨¦ central, critic¨® a Egor Yakovlev en la XIX Conferencia del PCUS. Anteriormente, Ligachov se hab¨ªa enfrentado al director causa de otros temas. Esta vez se trataba de los privilegios de los funcionarios del partido, juzgados en una encuesta de opini¨®n publicada en la revista. En verano, algunos de los servicios de elite fueron abolidos. "Se ha cerrado la cantina del Kremlin, me consta por propia experiencia".
Cree Yakovlev que la perestroika o reestructuraci¨®n ha pasado por tres per¨ªodos desde que comenz¨® en 1985. "En el primero la gente cre¨ªa que con girar un poco la cabeza y la ayuda del progreso t¨¦cnico cient¨ªfico, todo se resolver¨ªa. Luego, vino la lucha contra la burocracia y, por ¨²ltimo, nos hemos dado cuenta de que deben cambiarse las estructuras pol¨ªticas que reproducen los m¨¦todos autoritarios y el burocratismo".
Los ¨²ltimos cambios en la direcci¨®n sovi¨¦tica no inquietan a Yakovlev. En su opini¨®n, Gorbachov se habr¨ªa convencido durante el verano del peligro de retrasar las reformas, y el viaje a Krasnayarski Krai, en Siberia, le oblig¨® a "acelerar las ruedas m¨¢s de lo que hubiera querido". Gorbachov "tom¨® carrerilla" durante sus vacaciones y al volver "salt¨® la valla". "La perestroika sovi¨¦tica, a diferencia de la china, ttiene", seg¨²n Yakovlev, un "per¨ªodo de conversaci¨®n".
Las decisiones del pleno del comit¨¦ central fueron posibles gracias a la "retirada voluntaria" de Andrei Gromiko, que se ha ido "con todos los honores y respetos". "Al dejar de ser presidente, Groiniko no ha perdido nada, ni la dacha, ni el coche, ni la escolta. Nosotros quer¨ªamos hacer un reportaje de su primer d¨ªa de jubilado, pero no pudimos porque le custodian como antes".
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