?Qu¨¦ nos queda ya por decir a las mujeres

Acabo de leer en EL PA?S del 13 de octubre una informaci¨®n referida a una sentencia de la Audiencia de Barcelona sobre un presunto delito de violaci¨®n. Seg¨²n el fallo del tribunal, para admitir que el delito de violaci¨®n sea tal no s¨®lo es necesaria una intimidaci¨®n por parte del agresor, sino tambi¨¦n una resistencia de la v¨ªctima; resistencia que, seg¨²n dicha sentencia, debe ser real, continuada, seria y verdadera, no convencional, fingida y simulada". Resistencia real, porque ya est¨¢ bien de fingir que no deseamos hacer el amor cuando, sin embargo, buscamos con ah¨ªnco el coito, recibi¨¦ndolo con fervor a la primera ocasi¨®n que se nos presenta; resistencia continuada, porque el miedo, la desesperaci¨®n y la sensatez son palabras que no deben, por lo visto, formar parte de los esquemas de comportamiento femeninos; resistencia seria y verdadera, porque la serenidad y ese deber de proteger nuestra integridad (por otro lado, tantas veces atacada) han de prevalecer sobre todo lo dem¨¢s en el momento de la violaci¨®n; resistencia no convencional... Todos sabemos lo convencionales que pueden llegar a ser las violaciones en estos tiempos que corren...Por favor, se?ores, por favor.

Si es as¨ª como nos ven ustedes y si es as¨ª como ven nuestra se

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xualidad, me parece incre¨ªble que haya nadie que pueda desear mantener un trato ¨ªntimo con nosotras. A m¨ª, personalmente, me dar¨ªa asco.-