Moldavia, del cir¨ªlico al latino
El camino hacia la rumanizaci¨®n cultural de una rep¨²blica de la Uni¨®n Sovi¨¦tica
La rep¨²blica sovi¨¦tica de Moldavia ha iniciado una rumanizaci¨®n cultural y se dispone a cambiar el alfabeto cir¨ªlico por el latino, tras casi medio siglo de intentos por demostrar la existencia del moldavo como un idioma propio diferente al rumano. Glasul (La Voz), una revista experimental y cooperativa escrita en rumano con tipos latinos, est¨¢ a punto de salir a la calle por primera vez desde la fundaci¨®n de esta rep¨²blica, en 1940.
Los compatriotas de Nicolae Ceaucescu, parad¨®jicamente, se hab¨ªan acostumbrado a los caracteres cir¨ªlicos de las revistas moldavas. "Nuestras revistas tienen mucho ¨¦xito en Ruman¨ªa porque all¨ª no hay nada que pueda leerse", dice Timus Shtirbu, un escritor que confecciona un programa televisivo infantil. Shtirbu tiene permiso para leer en antena las canciones, adivinanzas y relatos folcl¨®ricos que recibe de los ni?os y abuelas rumanos sometidos a un dr¨¢stico racionamiento televisivo en su pa¨ªs. Sus colegas de la Prensa escrita a¨²n no pueden, nos dicen, publicar las cartas llegadas desde Ruman¨ªa.Dos n¨²meros de GIasul esperan s¨®lo el visto bueno oficial para ser distribuidos, dice el escritor M¨ªjail Chimpoi, candidato a diputado y miembro de la Comisi¨®n Oficial que ha recomendado la adopci¨®n del moldavo como lengua estatal y el paso al alfabeto latino. En marzo, el Soviet Supremo de Moldavia deber¨¢ aprobar la f¨®rmula de coexistencia entre el moldavo y otras lenguas habladas en la rep¨²blica, as¨ª como el programa para cambiar de alfabeto sin traumas.
Estancamiento
Leonid Breznev y su ministro del Interior, Nikolai Shchelekov, se templaron en Moldavia, recalca Chimpoi, que considera a la rep¨²blica como una de las m¨¢s marcadas por el estancamiento. Con otros de sus colegas, Chimpoi fue etiquetado como nacionalista a ra¨ªz de las conclusiones de un congreso de escritores que, en 1965, pidi¨® el alfabeto latino..Con las primeras posibilidades de expresar divergencias, Moldavia se ha convertido en escenario de un movimiento informal de reivindicaciones nacionalistas que salen al paso de la desrumanizack¨ªn obligada por la instauraci¨®n del poder sovi¨¦tico en la antigua Besarabia rumana, anexionada por Mosc¨² por el Pacto germano-sovi¨¦tico, en 1939.
Los escritores de la rep¨²blica que cuelgan ya anuncios en caracteres latinos en su asociaci¨®n, participan activamente en las revindicaciones culturales junto a la Liga Democr¨¢tica de Estudiantes, el Club Mateevich y el Movimiento Democr¨¢tico de Apoyo a la Perestroika, una especie de Frente Popular que ha tenido sus encontronazos violen tos con las autoridades.
Ivan Bodiul, primer secretario de Moldavia entre 1961 y 1980 ha emergido recientemente en Mosc¨² asegurando que todav¨ªa quedan muchos de sus cuadros en la direcci¨®n que hoy preside Semen Grossu. El segundo secretario de la rep¨²blica, V. Smirnov, cesado en noviembre, fue detenido el pasado enero en Mosc¨² por sus implicaciones con la mafia uzbeka. Smirnov era uno de los nombres de la lista que Vitafl Korotich, director del semanario Ogoniok, hab¨ªa entregado a Gorbachov en el Kremhn durante la XIX Conferencia del PCUS.
En cualquier caso, la rumanizaci¨®n l¨¦xica no parece preocupar excesivamente a los dirigentes moldavos. Los locutores de la televisi¨®n dicen ahora "diputatii popurului" (diputado popular), "circumscriptie" (circunscripci¨®n) y 'consiliu" donde antes utilizaban los t¨¦rminos eslavos "narodni", "okgrug" y "soviet". Hasta la perestroika se designa aqu¨ª en su variante latina de "reestructurarii". El Soviet Supremo de Moldavia as¨ª lo decidi¨® en un decreto el pasado oto?o.
Col y ma¨ªz
Los expertos agr¨ªcolas ya pueden utilizar las palabras rumanizantes equivalentes a col y ma¨ªz sin temor al l¨¢piz rojo del corrector. El hecho de vivir en una rep¨²blica sovi¨¦tica no supone que uno haya de convertirse en el "hazme re¨ªr de todo el mundo y descubrir una nueva lengua", clamaban 150 escritores moldavos el pasado octubre.El proceso de rumanizaci¨®n cultural puede tener implicac¨ªones pol¨ªticas en el futuro, seg¨²n el etn¨®grafo Valetin Zelemchuk. "Entre los rumanos y nosotros pusieron una muralla china", cuenta Zelemchuck.
Bucarest se limita,por el momento a mandar a Moldavia cuadernos para colorear, tratados sobre la ¨²lcera de duodeno y folletos de terape¨²tica naturista, en venta en la librer¨ªa Amistad de Kishinev. Los rumanos han sido privados de sus excursiones por una normativa aduanera sovi¨¦tica que les impide llegar en un autob¨²s vac¨ªo y marcharse con un cargamento de compras.
Los rumanos siguen visitando a sus parientes moldavos o invitados por sus colegas. Nadie sabe decir si buscan tambi¨¦n asilo pol¨ªtico. Los visitantes rumanos se arman a veces de valor y . ponen verde a Ceaucescu, incluso p¨²blicamente".
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