Empresarios y dise?adores, en busca de una moda espa?ola

El Sal¨®n Cibeles inaugur¨® ayer su s¨¦ptima edici¨®n en Madrid con la presentaci¨®n de 57 dise?adores, muchos de ellos nuevos en este mercado, en busca de los cuales se lanzaban compradores, industriales y empresarios, aunque estos ¨²ltimos de forma t¨ªmida y recelosa.Una de las novedades ven¨ªa marcada por el pabell¨®n del onubense Pepe Jim¨¦nez, que acudi¨® con algo ins¨®lito en este tipo de muestras, ya que su producto consist¨ªa exclusivamente en trajes de andaluza realizados casi de forma artesanal. Sus trajes se centran fundamentalmente en una inspiraci¨®n tomada de los a?os veinte y treinta. Pepe Jim¨¦nez, que hoy presentar¨¢ su trabajo en la Pasarela Cibeles, s¨®lo realiza modelos exclusivos, y s en alguna ocasi¨®n repite modelo nunca lo hace con el estampado del tejido, casi siempre alejado de los tradicionales lunares.

Aunque la mayor¨ªa de los profesionales que participan en el sal¨®n se encuentran satisfecho de la plataforma que les brinda la Pasarela Cibeles para exponer sus trabajos y entrar en contacto con compradores y empresarios, no por ello dejaban de airear sus quejas por el poco tiempo que se les hab¨ªa facilitado para decorar e instalar sus casetas. "Pens¨¢bamos tener al menos un par de d¨ªas y s¨®lo nos dejan 15 horas, que son insuficientes". As¨ª se expresaba un empleado de Di¨¢metro, una nueva firma que acude por primera vez a la Pasarela Cibeles, pero que en anteriores convocatorias en el Sal¨®n Gaud¨ª, de Barcelona, ha obtenido diversos premios al mejor pabell¨®n.

La mayor¨ªa de los dise?adores que acuden al sal¨®n tienen como objetivo primordial entrar en contacto, m¨¢s que con compradores, con industriales que vean en la moda un nuevo mercado. "Adem¨¢s de que es un per¨ªodo de claro crecimiento para nuestra profesi¨®n, podr¨ªan fijarse en el ¨¦xito que con estas f¨®rmulas est¨¢n teniendo los italianos en especial el grupo Armani" afirmaba uno de los hermanos Errando Mariscal, de la firma Tr¨¢fico de Modas. No obstante, ellos, al igual que otros dise?adores, quieren llevar a cabo ese proyecto con la industria espa?ola. "Los extranjeros cada vez se acercan m¨¢s al dise?o espa?ol, y ser¨ªa una pena que tomaran la delantera a la industria espa?ola, ya que muchos de nosotros no queremos convertirnos en made in Italy; queremos ser un producto espa?ol", conclu¨ªa Errando Mariscal.

Casi todos los dise?adores saben que el ¨¦xito est¨¢ de su parte, pero se muestran quejosos del conservadurismo del empresario espa?ol; coinciden tambi¨¦n enafirmar que la ayuda del empresario abaratar¨ªa el producto final, la moda. Muchos de los dise?adores -en su b¨²squeda no s¨®lo (le a originalidad, sino tambi¨¦n del tejido y la confecci¨®n terminan con un producto final caro, dif¨ªcil para competir con los grandes e inalcanzable para los que buscan precios m¨¢s baratos.

El sal¨®n Cibeles tambi¨¦n ofrece su propia pasarela con el fin de que los dise?adores muestren en desde sus trajes a los compradores y no s¨®lo colgados en una percha. El Comit¨¦ de Moda ofrece a todos la pasarela y tambi¨¦n un grupo de maniqu¨ªes, peluqueros y maquilladores.