"Que dejen la calle como estaba"

"Queremos que dejen la calle como estaba". Esta frase resume las reivindicaciones de los vecinos de la calle del General Alvarez de Castro (Chamber¨ª), que tras varios d¨ªas de pataletas callejeras han conseguido lo que parec¨ªa imposible: paralizar las obras de un aparcamiento p¨²blico. La sospecha m¨¢s o menos fundada de que las obras municipales pod¨ªan debilitar los cimientos de los edificios pr¨®ximos ha sido la piedra angular de toda la protesta, en la que se han entremezclado reivindicaciones urban¨ªsticas y ecologistas. La calle, mientras, est¨¢ patas arriba.El general Mariano ?lvarez de Castro, que resisti¨® nueve meses el asedio de los franceses en Gerona, estar¨ªa orgulloso de los vecinos de la calle que lleva su nombre. Ellos, en cuatro d¨ªas han conseguido que el pleno del Ayuntamiento de Madrid paralice las obras "hasta que se realice un nuevo estudio geot¨¦cnico de la zona". En cualquier caso la paralizaci¨®n es provisional.Y es que ellos dicen que el aparcamiento puede perjudicar a la cimentaci¨®n de los edificios donde viven. "Puede producirse un hundimiento como en la avenida de la Ilustraci¨®n, o un corrimiento del terreno como el que se produjo durante la construcci¨®n del aparcamiento de la calle de Narv¨¢ez", dice otro vecino que prefiere no dar snombre, dada su condici¨®n de militar en activo."Para evitar corrimientos, primero haremos muros que sirvan de pantalla al terreno, y luego vaciaremos el interior, con lo que esta posibilidad queda pr¨¢cticamente anulada", dice Eugenio Morales, concejal de Circulaci¨®n y Transportedel Ayuntamiento.

Estudio geol¨®gico

Por si los vecinos tuvieran ra z¨®n, el Ayuntamiento va a realizar el nuevo estudio geol¨®gico y va a revisar los edificios de la zona. "Lo haremos a pesar de que en estudios anteriores s¨®lo se localiz¨® agua a 10 metros de profundidad, circunstancia que no ofrece ninguna dificultad para la construcci¨®n del garaje, que tendr¨¢ una profundidad m¨¢xima de 5,5 metros".La existencia de l¨ªquido elemento en el subsuelo es precisamente uno de los caballos de batalla de los vecinos. Carlos de la Cuadra, ex gerente de Urbanismo (1981-1982) y vecino de la zona del conflicto, afirma que bajo la calle, bajo el aparcamiento, hay H20 en abundancia: "Por aqu¨ª pasa el viaje de agua de la Alcubilla, y dicen los viejos del lugar que tambi¨¦n pasa el llamado arroyo de Las Negras".El caso es que varios edificios han hecho agua en los ¨²ltimos a?os. Un s¨®tano de la finca n¨²mero 26 de esa calle se hundi¨® dos metros mientras se celebraba una asamblea de taxistas. "Y luego casi nos ahogamos porque debajo pasaba un torrente", dice uno de los n¨¢ufragos. De hecho, el aparcamiento se construye en ?lvarez de Castro y no en la plaza del mismo nombre, como estaba previsto, debido a que en esta glorieta existen conducciones del Canal de Isabel II que no se pueden desviar.

Y quedan otros argumentos. El ecologista: los vecinos no quieren que talen algunas de las m¨¢s de 100 acacias que tiene la calle para hacer hueco a las entradas del aparcamiento. Morales replica: "Algunos ¨¢rboles los trasladaremos, y tambi¨¦n plantaremos algunos nuevos cuando todo acabe".

El pol¨ªtico: ?para qu¨¦ tanto potenciar el transporte p¨²blico si luego se hacen aparcamientos para residentes para dejar hueco en la calle para que aparquen m¨¢s veh¨ªculos? "El Plan de Aparcarnientos para Residentes (PAR) lo est¨¢n copiando en muchas ciudades de Espa?a porque es mod¨¦lico. Ademas, como en el resto de Madrid, ha habido m¨¢s solicitudes que plazas", contesta Eugenio Morales.