El PCI defiende "la democracia como v¨ªa de desarrollo"
Europa ser¨¢ "el horizonte cultural y pol¨ªtico" del nuevo Partido Comunista Italiano, anim¨® ayer su secretario general, Achille Occhetto, en un discurso con el que abri¨® el 18? Congreso Nacional del partido. Occhetto rechaz¨® tanto el "individualismo capitalista como el colectivismo burocr¨¢tico", para defender "la democracia como v¨ªa de desarrollo".
El l¨ªder comunista present¨® al PCI como la fuerza pol¨ªtica que quiere trabajar a fondo para una "alternativa democr¨¢tica" al centralismo de la Democracia Cristiana junto con todas las dem¨¢s fuerzas progresistas del pa¨ªs."Estamos a favor de una Europa pol¨ªticamente fuerte y unitaria, ecol¨®gica y del espacio social", dijo Occhetto. Y de hecho el secretario comunista empez¨® su discurso abordando la cuesti¨®n ecol¨®gica, justific¨¢ndola con el hecho, dijo, de que hoy "emerge con claridad casi aterradora la relaci¨®n posible entre modernizaci¨®n y cat¨¢str¨®fe".
Hablando del desarrollo, afirm¨® que lo que hoy es decisivo es la "calidad y no la cantidad" de dicho desarrollo. Y a?adi¨®: "Lo que est¨¢ en discusi¨®n es la cultura pol¨ªtica de toda una ¨¦poca". Rechaz¨® tanto el " individualismo capitalista como el colectivismo burocr¨¢tico", para defender en su lugar "la democracia como v¨ªa de desarrollo" con la m¨¢xima participaci¨®n de todos los ciudadanos al control de tal desarrollo. "Ning¨²n poder deber¨¢ poder sustraerse a una regla democr¨¢tica", a?adi¨®.
Insistiendo en el problema de Europa, Occhetto, arrancando uno de los mayores aplausos, habl¨® de "un camino europeo del socialismo", pero a?adiendo que, puesto que nos hallamos frente a una nueva cita con la historia., "todos nos estamos enderezando hacia una meta, a la cual a¨²n no ha llegado nadie y en la que nadie puede pretender esperarnos".
"Las llaves de la alternativa", grit¨® Occhetto, sofocado por los aplausos, "no est¨¢n en las manos de Craxi. Est¨¢n en las manos de los electores, y nosotros les pedimos que las usen de la forma m¨¢s segura e inteligente".
Y dirigi¨¦ndose hacia los bancos donde Craxi, con todo el grupo dirigente socialista, lo escuchaba a veces cuchicheando entre ellos y a veces ech¨¢ndose, sorprendidos, las manos a la cabeza, les dijo: "Vosotros, compa?eros socialistas, sois un grupo que hab¨¦is combatido con pasi¨®n vuestra batalla por la autonom¨ªa. Pues bien, ten¨¦is que saber que os hall¨¢is frente a un partido y a un grupo dirigente que no se siente ni humillado ni dividido y que combate tambi¨¦n ¨¦l con. id¨¦ntica pasi¨®n la batalla por su autonom¨ªa".
Occhetto a?adi¨® que una de las finalidades del nuevo partido comunista va a ser precisamente la lucha para acabar con dicho equ¨ªvoco, que "pesa como una maza conservadora sobre toda la sociedad italiana".
Trabajar juntos
Hizo Occhetto una llamada a liberales, republicanos, socialdem¨®cratas, verdes y radicales para, que se unan a su batalla a favor de la alternativa democr¨¢tica. mientras acus¨® a los socialistas de nuevo de no haber sido capaces de encontrar un solo objetivo concreto sobre el que empezar a trabajar juntos ya ahora. Y a cuantos le hab¨ªan pedido, como demostraci¨®n tangible de que el nuevo partido comunista ha cortado por fin su cord¨®n umbilical con el pasado para convertirse en un partido nuevo, democr¨¢tico y reformista, que cambie tambi¨¦n de nombre, Occhetto les respondi¨®: "Nosotros no nos santiguamos ante el demonio ni colgamos ajos en nuestras ventanas para impedir que los vampiros vengan a chuparnos la sangre. La propuesta de cambio de nombre para un partido podr¨ªa ser una cosa seria".
Pero a?adi¨® que para llegar a ello es necesario antes que haya habido grandes transformaciones del panorama pol¨ªtico capaces de dar vida, dijo, "a una nueva formaci¨®n pol¨ªtica". En dicho caso, explic¨®, se tratar¨ªa de una cosa seria que no ser¨ªa ofensiva y que podr¨ªa ser decidida s¨®lo "aut¨®nomamente y no por presionas externas".
Sin embargo, seg¨²n el secretario comunista, hoy faltan todos esos presupuestos, y por ello concluy¨®: "No s¨¦ entonces por qu¨¦ deber¨ªamos cambiar de nombre. El nuestro ha sido y sigue siendo un nombre glorioso que hay, que respetar".
Las primeras reacciones del secretario socialista, Bettino Craxi, fueron ayer muy negativas, afirmando que se ha tratado de un "discurso viejo" con el que se llama a hacer la alternativa a todos menos a los socialistas, y que de ese modo la verdadera alternativa en este pa¨ªs no se har¨¢ ni en el a?o 3000.
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