Una muestra de carteles sobre los derechos del hombre y del ciudadano se exhibir¨¢ en 250 ciudades

Sesenta y seis grafistas de todo el mundo, entre ellos el catal¨¢n Peret, participan en la exposici¨®n Im¨¢genes Internacionales para los Derechos del Hombre y del Ciudadano, un encuentro in¨¦dito entre el grafismo y la escritura. La exposici¨®n inaugural se abre hoy, jueves, en el Couvent des Cordeliers, en el Barrio Latino de Par¨ªs, pero muestras id¨¦nticas se presentar¨¢n en 250 ciudades, 150 francesas y otras 100 del extranjero. En Espa?a, la exposici¨®n ha sido adquirida por los ayuntamientos de Madrid, Barcelona, Valencia, Valladolid, Alicante, Castell¨®n, Alzira, Alcoy, Denia, Elche, Torrente, X¨¢tiva y Cornell¨¢.

Adem¨¢s de la exposici¨®n, los organizadores editan un librocat¨¢logo -Por los derechos humanos, historias, im¨¢genes, palabras- que recoge biograf¨ªas de personajes franceses y entranjeros contempor¨¢neos de la Revoluci¨®n Francesa; reproduce los carteles de los 66 dise?adores, y aborda la situaci¨®n actual de los derechos humanos en el mundo. Para conseguir la autofinanciaci¨®n, la exposici¨®n -tres colecciones de los 66 carteles- y el libro han sido vendidos a ayuntamientos, centros culturales o museos de todo el mundo por s¨®lo 19.000 francos (algo m¨¢s de 350.000 pesetas).Peret es el ¨²nico espa?ol presente en la exposici¨®n, organizada por Artis 89, una asociaci¨®n cultural de la que forma. parte el estudio de dise?o parisiense Grapus. "Hubiera estado bien", afirma Peret, "la presencia de m¨¢s gente de Espa?a, pero me seleccionaron a m¨ª los miembros de Grapus". "Ya se sabe", admite, "que toda selecci¨®n es arbitraria. Yo represento a un pa¨ªs que no sabe que le represento, pero me hizo gracia que me eligieran junto a venerables nombres del dise?o porque representa un cierto reconocimiento profesional". Entre los 66 grafistas figuran el, polaco Roman Cieslewicz, el brit¨¢nico Alan Fletcher, los franceses de Grapus, el japon¨¦s Tadanori Yokoo, los norteamericanos Milton Glaser, Ivan Chermayeff y Seyumur Chwast, y los franceses Jan Lenica, Alain Le Quernec y Michel Quarez, de acuerdo con la selecci¨®n hecha. por el propio dise?ador catal¨¢n.

Los organizadores encargaron a los dise?adores un cartel que expresara su lectura de las declaraciones de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789 y 1793 y su resonancia en la actualidad. Peret ha dise?ado un cartel que sobre fondo negro y blanco incluye una figura humana dentro de un par¨¦ntesis rojo con una letra n en la parte superior derecha. El dise?ador explica as¨ª su trabajo: "El hecho de que se definan los derechos humanos, al mismo tiempo los limita, porque ?qu¨¦ pasa con los que no figuran en la declaraci¨®n? Por eso eleg¨ª el par¨¦ntesis, que es un espacio extraodinario donde se puede representar algo. Pero luego me di cuenta de que algunos pod¨ªan hacer una lectura negativa y a?ad la n. Es un par¨¦ntesis elevado a la en¨¦sima potencia".

Diversas t¨¦cnicas

Peret duda intelectualmente, aunque no gr¨¢ficamente, de su representaci¨®n de los derechos humanos, "un tema dif¨ªcil", que los otros dise?adores han plasmado de m¨²ltiples maneras utilizando las t¨¦cnicas m¨¢s diversas, desde el collage a la pintura, la fotograf¨ªa o el dibujo. Glaser, por ejemplo, ha elegido una mujer con el gorro frigio rodeada de los 18 art¨ªculos de la declaraci¨®n. Chermayeff ha dise?ado un ¨¢rbol seco adornado con cintas tricolores y Roland Topor se ha centrado en uno de los derechos excluidos de la declaraci¨®n. Su cartel acoge a un pobre somnoliento con los brazos cruzados y la leyenda "Por el derecho a la pereza".Con motivo de la inauguraci¨®n de la exposici¨®n, que estar¨¢ abierta hasta el 14 de julio, el martes y el mi¨¦rcoles se celebr¨® en el Beaubourg un coloquio sobre la creaci¨®n gr¨¢fica al servicio de las causas humanitarias. Peret intervino el martes para presentar una de sus ¨²ltimas realizaciones, el anagrama de la Fundaci¨®n Anti-SIDA Espa?ola. "Contrariamente a lo que mucha gente cree, el dise?ador no es un artista, sino un comunicador", dice Peret. "Por eso, de acuerdo con lo que me pidieron los responsables de la fundaci¨®n -evitar cualquier connotaci¨®n de caridad cristiana-, he querido resumir y definir la solidaridad en un gesto: dos personas, en plano de igualdad, cogidas por el hombro".