Vattimo: "El pensamiento d¨¦bil es una forma de anarqu¨ªa no sangrante"
El fil¨®sofo exalta la tradici¨®n europea no violenta
Gianni Vattimo es el fil¨®sofo del posmodernismo. Su discurso sobre el pensamiento d¨¦bil como r¨¦plica a la ¨¦tica tradicional del catolicismo y el marxismo despierta fobias y filias. El profesor del departamento de hermen¨¦utica de la universidad de Tur¨ªn (Italia), de 53 a?os, anuncia la publicaci¨®n de un extenso tratado para despejar las dudas sobre su antimarxismo y visi¨®n l¨²dica de nuestra sociedad.
Vattimo, que cuestiona conceptos tradicionales sobre la verdad, el sujeto, el ser, la revoluci¨®n y el poder, se apoya en Heidegger y Nietzsche para afirmar que el pensamiento- d¨¦bil es una "anarqu¨ªa no sangrante".Pregunta. De la ontolog¨ªa d¨¦bil que desarrolla en su obra, ?puede deducirse una ¨¦tica de la tolerancia ?.
Respuesta. El pensamiento d¨¦bil plantea, efectivamente, una ¨¦tica de la tolerancia: hacemos una interpretaci¨®n de la cultura que toma como modelo la historia del ser de Heidegger con el prop¨®sito de debilitarlo, de reducirlo. Tenemos razones para defender la tolerancia y la no violencia porque la ¨²nica racionalidad que podemos aceptar es la que entronca con una tradici¨®n que, desde el medievo hasta la edad moderna, ha de venido en la reducci¨®n de las estructuras fuertes, del poder, el Estado.
P. ?Cu¨¢l ser¨ªa el m¨¦todo de acci¨®n del pensamiento d¨¦bil?
R. El pensamiento d¨¦bil es a la vez una reducci¨®n de la filosof¨ªa y no veo a la filosof¨ªa como gu¨ªa de una acci¨®n pol¨ªtica. El pensamiento d¨¦bil propone el abandono de la violencia, el control sobre la destrucci¨®n de la naturaleza -en cierto modo somos ecologistas- y, en definitiva, una interpretaci¨®n menos neur¨®tica de la existencia.
P. ?Podr¨ªa pensarse que el pensamiento d¨¦bil elude el problema de las relaciones de dominio?
R. En M¨¢s all¨¢ del sujeto se planteaba esta cuesti¨®n. La experiencia del terrorismo italiano estaba fresca y es el libro m¨¢s pol¨ªtico que he escrito. Propon¨ªa la sustracci¨®n del sujeto a sus patrones. La pol¨ªtica es un debilitamiento del sujeto e implica la. sustracci¨®n de ¨¦stos como s¨²bditos del poder. El poder necesita entidades fuertes, la polic¨ªa, por ejemplo. Entonces, se trata de negar estas entidades fuertes, es decir, abogar por la destrucci¨®n del poder y no apostar por una opci¨®n m¨¢s fuerte.
P. ?Ser¨ªa la anarqu¨ªa?
R. El pensamiento d¨¦bil es una anarqu¨ªa no sangrante. Es demasiado d¨¦bil para organizar atentados. Se trata de propiciar ¨¢reas de libertad para los sujetos d¨¦biles, de emancipar al hombre. Hay una componente emancipadora en la desorganizaci¨®n de las democracias tardoindustriales. La autonom¨ªa es un intento de disoluci¨®n del Estado.
P. ?Quiere decir esto que no es posible la transformaci¨®n pol¨ªtica desde la perspectiva de nuestra racionalidad?
R. La idea de la desorganizaci¨®n de la sociedad se inici¨® en m¨ª a partir de un progresivo deterioro del principio de la realidad. La transformaci¨®n pol¨ªtica no se consigue a trav¨¦s de la toma del poder social, como defienden los comunistas, o por la restauraci¨®n del liberalismo cl¨¢sico, sino a partir de contaminaciones del propio sistema.
P. ?No es cierto que el pensamiento d¨¦bil puede desembocar en una filosof¨ªa del no compromiso?
R. Es falso eso de que el pensamiento d¨¦bil es resignado, indiferente. Yo dir¨ªa, en todo caso, que es asc¨¦tico. Nuestra teor¨ªa intenta convencer de que no es posible continuar haciendo la guerra porque ser¨ªa el final de todos nosotros. Es una forma de educar al hombre para vivir en un mundo donde la beligerancia no es posible.
Babelia
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