Los 'no alineados' se modernizan, pero no se unifican
La moderaci¨®n y el pragmatismo promovidos por Yugoslavia han caracterizado el proyecto de declaraci¨®n elaborado esta semana por la IX Conferencia de Pa¨ªses no Alineados, que anoche estaba previsto que se sometiera a la votaci¨®n de la asamblea plenaria reunida en Belgrado. Once p¨¢ginas, frente a las 586 que ocup¨® el texto final de la cumbre en Harare (1986), constituyen el mejor s¨ªmbolo de la voluntad de modernizaci¨®n y eficacia del movimiento.
De todas formas, el lastre de una diversidad que engloba desde Arabia Saud¨ª a Nicaragua, pasando por Zambia y Nepal, ha quedado plasmado en una serie de documentos anejos que, pese a su vocaci¨®n resolutiva, caen de forma irremediable en la generalidad. As¨ª ha sucedido, por ejemplo, con el texto sobre el conflicto irano-iraqu¨ª, uno de los ¨²ltimos escollos en los que todav¨ªa se afanaba el comit¨¦ pol¨ªtico en la madrugada de ayer. Al final, se alcanz¨® una f¨®rmula de compromiso en la que los no alineados expresan su respaldo a las gestiones que emprendiera el a?o pasado el secretario general de la ONU, Javier P¨¦rez de Cu¨¦llar. Soluciones similares han permitido sacar adelante, casi a ¨²ltima hora, los documentos sobre el L¨ªbano, Afganist¨¢n, Latinoam¨¦rica, el desarme y la informaci¨®n, de los que todos los antagonistas ten¨ªan que salir satisfechos. Tal es el riesgo del consenso que impone la amplitud de un foro de 102 pa¨ªses.
A pesar de las referencias al imperialismo y al colonialismo recogidas en la Declaraci¨®n, el tono general del texto hace prevalecer las posturas moderadas en las que se opta por la concertaci¨®n como contrapunto al enfrentamiento.
Se reconoce que los no alineados no pueden cambiar el mundo por s¨ª solos, aunque deseen participar en cualquier intento por remodelarlo. En el n¨²cleo central del escrito, adem¨¢s del ya conocido tema de la deuda externa, se vinculan los conceptos de desarme y desarrollo y se pide que se d¨¦ una forma concreta a esta relaci¨®n.
En total, unos 40 documentos resolutivos (action papers), entre los del comit¨¦ pol¨ªtico y los del econ¨®mico, han sido elaborados a lo largo de la semana, seg¨²n inform¨® ayer el ministro yugoslavo de Exteriores, Budimir Loncar. S¨®lo los temas m¨¢s destacados estar¨¢n presentes en el borrador de la Declaraci¨®n Final que anoche deb¨ªa de ser aprobado.
En el intento por ver reflejados en ese texto sus puntos de vista, se han concentrado los esfuerzos de las delegaciones asistentes. La insistencia de Colombia ha logrado que la condena al tr¨¢fico de drogas constituya un punto separado dentro de la Declaraci¨®n, en concreto el que hace el n¨²mero quince. Es ah¨ª tambi¨¦n donde se han revelado las profundas contradicciones existentes entre los miembros.
"A diferencia de anteriores ocasiones, los documentos que hemos elaborado en esta convocatoria son documentos afirmativos, que priman el di¨¢logo", asegur¨® ayer Loncar en una comparecencia ante la prensa. La cuesti¨®n es ahora cu¨¢l va a ser el destino de esos textos. "Todos los aqu¨ª presentes vamos a acudir en breve a las Naciones Unidas y desde esa tribuna haremos saber nuestras resoluciones a la comunidad internacional", manifest¨® el jefe de la diplomacia yugoslava. A pesar de los nuevos aires que ensalzaba continuamente, Loncar no supo, no quiso o no pudo concretar los avances.
Durante toda la ma?ana de ayer, prosiguieron las intervenciones de los jefes de delegaci¨®n ante la asamblea, en cuyo anfiteatro se apreciaban ya ausencias notables. Muammar el Gaddafir, Yasir Arafat, Hosni Mubarak, el rey Hussein de Jordania, el emir de Kuwait y el presidente argentino, Carlos Menem, entre otros, abandonaron la capital yugoslava el d¨ªa anterior.
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