El Cr¨¦dit Commercial de France ofrece a Banesto un intercambio de participaciones

Banesto ha recibido un ofrecimiento verbal por parte del banco Cr¨¦dit Commercial de France (CCF) para que se reconstituyan las participaciones cruzadas que ambas entidades tuvieron en el pasado. A trav¨¦s de los lazos de Banesto con la familia Parayre, iniciadora de la actividad de esta entidad, y de Uni¨®n y el F¨¦nix, Banesto tuvo hasta la nacionalizaci¨®n del CCF por el Gobierno de Mitterrand, el 11 de febrero de 1982, en torno al 3,5% del capital del banco galo, seg¨²n informaron fuentes burs¨¢tiles francesas. Estas a?adieron que el CCF, por su parte, tuvo hasta el 5% del capital del banco espa?ol. La propuesta concreta es la de reconstituir estas participaciones mediante un canje de acciones.

Una fuente pr¨®xima al grupo Lafarge Coppe¨¦ se?al¨® que Banesto no ha rechazado la propuesta, aunque prefiere aplazar un eventual acuerdo sobre el tema hasta la constituci¨®n de la Corporaci¨®n Industrial del banco para poder valorar la naturaleza del canje.Una filial del CCF, el grupo cementero y de materiales de construcci¨®n Lafarge Coppe¨¦, controla indirectamente un 3% del capital de Banesto a trav¨¦s del grupo cementero catal¨¢n Asland, del cual la cementera gala posee el 46%.

La construcci¨®n de esa participaci¨®n fue ardua y prolongada para el grupo franc¨¦s -abarc¨® un proceso de dos a?os-, y la negociaci¨®n final estuvo rodeada de presiones que dejaron como saldo esta presencia de Lafarge en Asland.

Para defenderse de la presencia de Lafarge, Asland constituy¨® hace dos a?os con Aguas de Barcelona y Catalana de Gas un holding denominado AAC Cirup, destinado a ser una coraza protectora. Ahora Asland estudia la salida del AAC Grup.

Lafarge forma parte del n¨²cleo duro del CCF, el grupo de accion¨ªstas que con el apoyo del Gobierno se convirtieron en abril de 1987, con la reprivatizaci¨®n del CCF, en la garant¨ªa de control por parte de grupos franceses de las entidades que regresaban al dominio del mercado.

Ofensiva extranjera

A nadie escapa que Banesto controla nueve millones de toneladas de cemento anuales a trav¨¦s de su grupo en el sector que tiene como buque insignia a Valenciana de Cementos, pero cuyo grupo es mucho m¨¢s extenso que este simple nombre. Los analistas del sector consideran que la inversi¨®n inicial en capital fijo que hay que realizar para producir cada tonelada de cemento es de unos 1.000 d¨®lares. Es l¨®gico, por tanto, que los grupos extranjeros aspiren a tomar posiciones en empresas existentes. Lo que sorprende es la incapacidad de los empresarios espa?oles por mantener bajo su control esos conglomerados de mercados cautivos que han logrado mantener su rentabilidad a pesar del tipo de cambio de la peseta a expensas del auge inmobiliario y las obras p¨²blicas.El jueves 28 de septiembre, el Banco Central vend¨ªa el 24% de su filial cementera Financiera y Minera a Ciments Frangais, un grupo que, ya controlaba las cementeras Molins, Rezola y Promsa. Curiosamente, Paribas, banco franc¨¦s reprivatizado en enero de 1987, tiene el 25% de Ciments Frangais, mientras que la aseguradora Union des Assurances de Paris, una sociedad sumamente activa en Espa?a, tiene el 3% del capital de Paribas.

Todo indica que los grandes grupos cementeros franceses con buena l¨®gica de mercado -proximidad, baja incidencia del coste del transporte, una base exportadora con una divisa m¨¢s d¨¦bil- buscan adquirir una cuota de mercado en el cemento espa?ol sin dejar de lado el aspecto financiero por la proximidad de los bancos franceses en la operaci¨®n, que en ¨²ltima instancia buscan constituir una base de capital financiero -industrial y bancario-, si no en forma plena al menos en sociedad. Mientras, el Banco Central quedar¨¢ como pieza menor de esta operaci¨®n Ciments Frangais-Paribas.