Todo un puente

No se le pod¨ªa pedir mucho a una jornada semifestiva, y tal vez por eso los escasos inversores que acudieron al parqu¨¦ se conformaron con un peque?o recorte como resultado de la incapacidad de compradores y vendedores para orientar los precios. El tama?o de las ¨®rdenes que llegaban a los corros y al mercado continuo no permit¨ªa demasiadas florituras, teniendo que conformarse los operadores con aproximarse lo suficiente a lo que solicitaban sus clientes. Como en los d¨ªas anteriores, para casar un orden de un par de miles de t¨ªtulos era necesario reunir unas cuantas partidas, lo cual ha obligado a algunos inversores a dejarlo para otro d¨ªa, ante el posible encarecimiento que representa operar en el mercado de picos.La falta de orientaci¨®n era ayer m¨¢s fuerte en las bolsas espa?olas, por lo que las dudas de Wall Street ante unas cifras de empleo aparentemente buenas tuvieron un reflejo inmediato sobre las cotizaciones. A esta indefinici¨®n hay que a?adirle la existencia de demasiadas jornadas festivas en estas bolsas, mientras que el resto de los mercados mundiales seguir¨¢ contratando, lo que convierte en demasiado arriesgada cualquier toma de posiciones, sobre todo cuando en Wall Street no est¨¢n las cosas muy claras.

El ¨²nico grupo que funcion¨® sin dejarse influir por el entorno fue el bancario, con el mismo papel de todos los d¨ªas y unos cuantos recortes que, de momento, ponen muy dif¨ªcil la consecuci¨®n de un final de ejercicio a la medida de las carteras institucionales.