La batalla de Coppola

Al emitir las dos partes de El Padrino, Telemadrid marca un acontecimiento cinematogr¨¢fico singular para el fin y el comienzo de a?o.La Paramount, pretendiendo hacer una pel¨ªcula de impacto, financi¨® a Mario Puzzo la escritura de una novela para realizar posteriormente el filme. El libro fue un best-seller que vendi¨® 11 millones de ejemplares a pesar de las dificultades que puso la liga de Antidifamaci¨®n Italo-Americana para evitar su difusi¨®n.

Los productores pensaron primero en Peter Yates y despu¨¦s en Costa Gavras para dirigir la pel¨ªcula. Al final, un joven de apenas 30 a?os llamado Francis Ford Coppola, cuyo m¨¦rito m¨¢s sobresaliente era ser guionista oscarizado de la pel¨ªcula Patton, se alz¨® con el proyecto. Sin embargo, tuvo que luchar contra multitud de elementos adversos para conseguir el ¨¦xito.

Convenci¨® a los productores de que la acci¨®n se desarrollara en las calles de Nueva York y en la ¨¦poca de los a?os cuarenta, y no en San Louis y en los a?os setenta, como estaba previsto. Tampoco gustaba a los productores que fuera Marlon Brando el int¨¦rprete de don Corleone. La figura del m¨ªtico actor de los sesenta estaba devaluada, no era. comercial y hab¨ªa creado constantes problemas en sus anteriores pel¨ªculas. Brando se someti¨® a una prueba voluntaria y sin apenas maquillaje demostr¨® a todos que ¨¦l era el ¨²nico que pod¨ªa encarnar al viejo don Corleone. Fue aceptado con la condici¨®n de que no cobrara sus altos honorarios y recibiera a cambio un porcentaje de los beneficios del filme.

Coppola, seguro del proyecto que ten¨ªa entre manos, venci¨® todos los obst¨¢culos a cambio de no recibir ning¨²n salario por su trabajo, que cambi¨® por un 6% de los beneficios de la pel¨ªcula.