Vitautas Landsherguis, "Lituania ser¨¢ libre e independiente"

Aqu¨ª dentro, el d¨ªa despu¨¦s de las reivindicaciones de la independencia lituana, con 300.000 personas en la plaza, el Sajudis se asemeja a un partido con sus carteles y sus insignias, a una secta con sus contrase?as, su fatalidad y su leyenda, pero tambi¨¦n a un germen de gobierno del nuevo Estado que vendr¨¢, con ordenadores que tienen bajo control la red del movimiento, Polonia llamando al tel¨¦fono, la capacidad incre¨ªble de pasar en un d¨ªa de la guerra a la paz, manteniendo la movilizaci¨®n pero evitando toda provocaci¨®n. En el centro de todo, tranquilo y casi gris, milagrosamente libre de los tics del liderismo, Landsberguis est¨¢ sentado en su oficina de presidente del Sajudis exactamente igual que cuando estaba en la c¨¢tedra de profesor de m¨²sica, vanguardia de una clase intelectual que rechaza el patron¨ªmico ruso y de una burgues¨ªa de las profesiones que vuelve a surgir de la sovietizaci¨®n: esc¨¦ptica, tras 50 a?os, frente a casi todo ' los s¨ªmbolos, la ret¨®rica y las promesas, tercamente confiada ¨²nicamente en el destino lituano de la independencia libre.Pregunta. Profesor Landsberguis, Lituania ha pedido la independencia, ha cantado el himno nacional, ha hecho bendecir sus banderas, como en el momento de ir a la guerra. ?Y ahora qu¨¦?

Respuesta. Ahora esperamos una respuesta, que ya no puede tardar. La manifestaci¨®n del jueves surgi¨® precisamente de la falta de respuesta por parte de Mosc¨². Para la independencia nosotros hab¨ªamos recogido millones de firmas, nuestros diputados ya hab¨ªan entregado un memor¨¢ndum a Gorbachov, al Gobierno sovi¨¦tico le hab¨ªamos pedido que iniciara una negociaci¨®n con Lituania, pero todo hab¨ªa sido in¨²til, nadie nos hab¨ªa escuchado. Entonces decidimos decir lo que quer¨ªamos el d¨ªa y en el lugar en que Gorbachov no hubiese podido evitar o¨ªrnos. Y fuimos a la plaza para pedir la independencia y la libertad.

Enga?o de Gorbachov

P. ?Pero Gorbachov les ha contestado ya, aqu¨ª en Vilna, declarando inaceptable el separatismo lituano?

R. M¨¢s que nada, Gorbachov ha venido de Mosc¨² con una f¨®rmula preparada y la ha repetido en la radio y en la televisi¨®n. Pero eso no es una respuesta, es un enga?o. Porque oculta el intento de escapar del verdadero problema, que es el conflicto entre un gran Estado y un peque?o Estado que por su potente vecino ha sido hecho prisionero con la fuerza. Gorbachov, en cambio, habla de la relaci¨®n de las rep¨²blicas de la URS S con el Gobierno central, prometiendo que cambiar¨¢: como si Lituania fuera una rep¨²blica sovi¨¦tica igual que las dem¨¢s, y no un libre Estado incorporado ilegalmente, al que no le interesa en absoluto mejorar la relaci¨®n con Mosc¨², sino simplemente transformarla en una libre relaci¨®n entre Estados soberanos.

P. Sin embargo, Gorbachov ha hablado de una nueva ley que prev¨¦ la posibilidad para las rep¨²blicas de salir de la URSS. ?Puede ser un camino?

R. Absolutamente no. El mecanismo estudiado es tal que en realidad nadie podr¨¢ salir. Y en cualquier caso, si reconoci¨¦ramos el valor de esta ley, reconocer¨ªamos a la vez que Lituania es leg¨ªtimamente una rep¨²blica sovi¨¦tica. Nosotros, en cambio, anunciaremos oficialmente a Gorbachov que todo -ello -incluida la ley- no nos ata?e. Nosotros no formamos legalmente parte de la URSS, porque fue Stalin el que nos captur¨®. As¨ª que pedimos a Gorbachov que se libere tambi¨¦n de esta herencia estaliniana.

P. ?Pero qu¨¦ es lo que debe hacer en concreto la URSS?

R. Nosotros ofrecemos a Mosc¨² la oportunidad de borrar este crimen internacional. El Kremlin podr¨ªa aprobar la f¨®rmula que Occidente ha propuesto para Lituania, es decir, la autodeterminaci¨®n, podr¨ªa iniciar negociaciones con Vilna para llegar a la independencia, podr¨ªa adherirse a la idea de una conferencia internacional con la participaci¨®n a igual t¨ªtulo de la URSS y de Lituania. Por ¨²ltimo, podr¨ªa aceptar el refer¨¦ndum del pueblo lituano. Pero no hay derechos que Mosc¨² deba o pueda concedernos. Nosotros no somos una colonia que ahora ha madurado para el estatuto. Somos un antiguo Estado europeo creado en la Edad Media, con su historia, que pide que se restablezca. La URSS, antes o despu¨¦s, tendr¨¢ que entenderlo: aunque tambi¨¦n Occidente deber¨ªa entenderlo.

P. ?Usted cree que Occidente es demasiado fr¨ªo con Lituania?

R. Me gustar¨ªa que Occidente se diera cuenta de que la nuestra es una batalla de independencia como la que Europa conoci¨® en el pasado, pero es tambi¨¦n una prueba decisiva para la democracia. Porque la superioridad de esa democracia respecto a los sistemas del Este debe ser ante todo moral.

Copyright La Repubblica / EL PAIS. Traducci¨®n: Beatriz Alonso.