Los presidentes Bush, Garc¨ªa, Paz y Barco debaten c¨®mo combatir el narcotr¨¢fico

George Bush, presidente de Estados Unidos, el pa¨ªs consumidor n¨²mero uno de coca¨ªna, llega hoy a Colombia para reunirse en Cartagena de Indias con Alan Garc¨ªa y Jaime Paz Zamora, sus hom¨®logos de Per¨² y Bolivia, los mayores productores de hoja de coca, y con Virgilio Barco, de Colombia, el mayor procesador y distribuidor de esa droga. Los cuatro mandatarios debatir¨¢n un plan contra el narcotr¨¢fico. Los extraditables por su parte, aprovecharon ayer para reforzar su campa?a a favor de la negociaci¨®n y anunciaron que el c¨¢rtel de Medell¨ªn entreg¨® sus tres laboratorios productores de coca¨ªna m¨¢s grandes.

Los extraditables, en la noche del martes, hicieron entrega ante 26 periodistas nacionales de los que denominaron los mayores laboratorios del mundo, construidos en la selv¨¢tica y pantanosa zona del Tari¨¦n, en la regi¨®n del Caribe, unos 300 kil¨®metros al sur de Cartagena. En un comunicado, los narcotraficantes aseguraban que esos laboratorios produc¨ªan al mes 20 toneladas de alcaloide y que la entrega es una prueba m¨¢s de su "promesa de luchar por la paz pamra fortalecer la democracia". Desde que a mediados de enero pasado los jefes de la droga colombiana anunciaron su intenci¨®n de someterse a la justicia nacional, han entregado, como muestra de buena voluntad, secuestrados, explosivos, helic¨®pteros y ahora laboratorios. Sin embargo, el general Miguel Maza M¨¢rquez, jefe. del DAS (Departamento Administrativo de Seguridad) y el jefe de la Polic¨ªa Nacional, general Miguel G¨®mez Padilla, minimizaron en una conferencia de prensa estos gestos de los narcotraficantes. Aseguraron que los laboratorios entregados estaban abandonados y que muchos de los secuestrados liberados pagaron su rescate.Cooperaci¨®n con Espa?a

El general Maza confirm¨® que la pr¨®xima semana se reunir¨¢ en Bogot¨¢ con los responsables de la lucha antinarc¨®ticos de Espa?a. "Hay que tomar medidas urgentes para evitar que Espa?a se convierta en la Colombia de Europa", dijo al subrayar que tratar¨¢n de trazar un plan conjunto. Maza insisti¨® en que la Interpol contin¨²a la b¨²squeda de los dos etarras que asesoraron al narcotr¨¢fico colombiano en la ejecuci¨®n de dos graves atentados terroristas que causaron m¨¢s de 200 muertos.

Durante seis horas, los cuatro jefes de Estado tratar¨¢n el problema en la caribe?a ciudad de Cartagena, a la que Bush viaja en un avi¨®n dotado de dispositivos antimisiles y protegido por helic¨®pteros, portaviones, submarinos, y hasta un robot detector de explosivos. Las expectativas de los cuatro presidentes son distintas, pero todos ellos tienen tambi¨¦n la esperanza de hallar un camino com¨²n para acabar con el flagelo de este comercio ilegal.

Cartagena, el corralito de piedra, como bautiz¨® un historiador a esta ciudad amurallada, tradicionalmente tomada por turistas, est¨¢ hoy invadida por agentes de seguridad y por periodistas llegados de toda el mundo.

La reuni¨®n tendr¨¢ como escenario la Casa de Hu¨¦spedes llustres, una, inmensa casona de piedra coralina, construida cerca, y a semejanza, del fuerte de Manzanillo. Esta fortaleza fue levantada por los espa?oles, en 1676 para defender a Cartagena de los filibusteros ingleses y franceses.

Sobre la mesa de negociaciones habr¨¢ un documento de 16 p¨¢ginas. Los presidentes de Per¨², Bolivia y Colombia tienen objeciones. ?stas que son el reflejo de que, en materia de tratamiento del narcotr¨¢fico, EE UU, por un lado, y los pa¨ªses productores y procesadores, por el otro, hablan lenguajes distintos. Para Washington lo m¨¢s importante son las medidas represivas; para los otros, la guerra se debe hacer en el campo econ¨®mico.

"El imperialismo internacional no nos puede seguir cerrando el paso al desarrollo. No se puede hablar s¨®lo de sustituci¨®n de cultivos. Lo que pedimos es que nos paguen lo justo por nuestros productos", dijo a este diario Javier Pulgar, embajador peruano en Colombia. El presidente de Bolivia, Jaime Paz, asegur¨® antes de abandonar su pa¨ªs que no aceptar¨¢ ning¨²n programa que conlleve un mayor empobrecimiento de los campesinos que se dedican al cultivo de la coca. En Bolivia hay 180.000 hect¨¢reas dedicadas a este cultivo; en Per¨², m¨¢s de 200.000.

La situaci¨®n de Colombia es distinta: es el procesador y el distribuidor del alcaloide. Por la espectacularidad de una guerra que se libr¨® durante cuatro meses, que dej¨® grandes p¨¦rdidas materiales y humanas; por la espectacularidad con que los extraditables anunciaron su voluntad de paz, la expectativa de todos los periodistas es saber si son ciertas las promesas de los jefes de la droga de poner fin al negocio y si es cierto o no que hay un acuerdo que se encuentra en marcha con el Gobierno del presidente Barco.