Billy Wilder

Con faldas y a lo loco (1959) y El apartamento (1960), son dos hitos en la filmograf¨ªa de Jack Lemmon. Irma la dulce (1963) y En bandeja de plata (1966), son otras dos de las pel¨ªculas en las que fue dirigido por Billy Wilder."En muchos aspectos", dice Jack Lemon "s¨ª es mi director favorito. Desde luego, es a quien le estoy m¨¢s agradecido profesionalmente, por todas las pel¨ªculas que hice con ¨¦l y de manera especial por Con faldas y a lo loco y El apartamento".

"Lo que me sorprende de Wilder no es s¨®lo su gran talento", a?ade Lemmon, "sino el hecho de comprobar que a medida que las d¨¦cadas, e incluso las generaciones, se han ido sucediendo, ¨¦l, su estilo y su manera de ver la comedia y el drama, no s¨®lo se han mantenido firmes frente a los tiempos, sino que se han colocado por delante de ellos".

Lemmon explica el origen de Con faldas y a lo loco y de El apartamento: "Ambas, obviando el hecho de que eran pel¨ªculas del gran Billy Wilder, fueron recibidas por la mayor¨ªa de la gente del cine con escepticismo. Dudaban de que hubiese para ellas cualquier posibilidad de ¨¦xito. Pensaban que Con faldas y a lo loco era un sketch c¨®mico de cinco minutos, con esos dos hombres, los personajes principales, vestidos con ropa de chica... 'Nunca...', dijeron. 'Olv¨ªdenlo... Es imposible que eso funcione. El nombre de Marilyn Monroe podr¨¢ ayudar pero realmente es una historia de cinco minutos, y eso es lo ¨²nico que se podr¨¢ sacar de ella...' ?Ufl Y se ha convertido en un cl¨¢sico".

"Cuando se hizo El apartamento", prosigue Jack Lemmon, "tomaron el proyecto por una pel¨ªcula realmente basada en el comportamiento de los ejecutivos de la ciudad, con asignaciones sexuales en el apartamento del personaje principal, 'Y ¨¦l los va a dejar...', se dec¨ªan. 'Dios m¨ªo, Jesucristo, ni Brecht hubiera hecho una cosa as¨ª. ?Qu¨¦ demonios le est¨¢ pasando a ese Wilder? Y Lemmon, ?se ha vuelto loco, quiere acabar con su carrera?' Lo interesante de ambos filmes es que son cl¨¢sicos, con Billy en lo m¨¢s alto de su poder como director y como escritor".

"Tambi¨¦n se empe?aron en decir que ad¨®nde pens¨¢bamos llegar con un t¨ªtulo como aqu¨¦l. '?Qu¨¦ apartamento? ?De qui¨¦n? ?A qui¨¦n le importa un apartamento?'. Y Wilder mantuvo su opini¨®n, dictada por la experiencia, de que si una pel¨ªcula funciona se puede llamar de cualquier forma. Creo que ten¨ªa raz¨®n; no creo que ning¨²n buen filme haya muerto jam¨¢s a causa de un t¨ªtulo".