Los ecologistas, pueden ser los ¨¢rbitros pol¨ªticos en las elecciones de Australia
La elecciones legislativas australianas que se celebran ma?ana con dos principales fuerzas en disputa -el Partido Laborista, en el poder, y una coalici¨®n opositora- y 29 peque?os partidos m¨¢s, entre ellos los verdes, que pueden decidir el juego pol¨ªtico de la C¨¢mara de Representantes y del Senado, seg¨²n las ¨²ltimas encuestas. Diez millones de australianos, de una poblaci¨®n total de 16 millones, se han registrado para votar en estos comicios que decidir¨¢n 148 esca?os en la C¨¢mara alta y 40 de los 76 esca?os del Senado.
Uno de los ¨²ltimos sondeos demostr¨® la existencia de un estrecho margen de diferencia entre el Partido Laborista, dirigido por Hawke, primer ministro, y la coalici¨®n de los partidos Nacional y Liberal, que encabeza Bob Andrew Peacock, y un 18% de electores decidido a votar por otros partidos. Seg¨²n esta en cuesta, publicada el pasado mi¨¦rcoles en una revista nacional, un 43%, votar¨¢ por los laboristas y un 39% por la alianza conservadora. La diferencia del 4% entre las dos mayores fuerzas pol¨ªticas de Australia es la misma de hace tres a?os, en que Hawke gan¨® las elecciones, informa Robert Milliken.La diferencia entre esta consulta y las anteriores es el alto ¨ªndice de apoyo de terceros partidos, particularmente los dem¨®cratas, una fuerza de centro que consigui¨® el 14%, de los apoyos, m¨¢s del doble (le los obtenidos en las elecciones de 1987. Los resultados en la C¨¢mara de Representantes ser¨¢n estrechos debido al sistema de listas abiertas y el voto de preferencia, seg¨²n el cual los electores votan a todos los candidatos conforme a un orden de preferencia, del primero al ¨²ltimo, y gana el esca?o aquel que consiga m¨¢s del 50% de los sufragios. Si nadie consigue esa mayor¨ªa, queda eliminado el candidato menos votado. Al no haber mayor¨ªa, el mismo sistema de preferencia se repite por segunda vez.
Reformas econ¨®micas
Bob Hawke, presidente del Gobierno australiano, declar¨® ayer que si gana las elecciones podr¨¢ culminar las reformas econ¨®micas iniciadas hace siete a?os, uno de los aspectos fundamentales de la campa?a electoral y tambi¨¦n uno de los principales problemas del pa¨ªs. Andrew Peacock, candidato de la coalici¨®n, que necesita aumentar en un 2,6'% o el n¨²mero de sus votantes para acabar con la mayor¨ªa parlamentaria laborista, manifest¨® que la econom¨ªa australiana est¨¢ enferma y en franca recesi¨®n.
Las dos principales organizaciones para la conservaci¨®n del medio ambiente han pedido a los electores verdes votar por los dem¨®cratas en primera instancia y despu¨¦s a los laboristas, tras evaluar las respuestas de los partidos a un cuestionarlo sobre protecci¨®n de los bosques. Dirigentes laboristas han reconocido que pueden perder seis esca?os. Bob Hawke pidi¨® a los ecologistas votar por su partido o, como m¨ªnimo, apoyarles como segunda preferencia. Hawke es el jefe de Gobierno australiano n¨²mero 18 desde que se efectu¨® la federaci¨®n del pa¨ªs y se convertir¨¢ en el segundo primer ministro en toda la historia del pa¨ªs con m¨¢s tiempo en el poder si gana las elecciones de ma?ana. Su partido es el m¨¢s antiguo desde que Australia. se feder¨®, en 1901, a?o en que se celebraron las primeras elecciones generales. Ha estado en el. poder desde marzo de 1983, tras; ganar las consultas de diciembre de 1984 y julio de 1987.
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