Goteo de deserciones en Sendero Luminoso

Un n¨²mero indeterminado de colaboradores y miembros del grupo mao¨ªsta peruano Sendero Luminoso ha venido entreg¨¢ndose durante los dos ¨²ltimos meses a las autodefensas campesinas de Ayacucho, conocidas como rondas, con la ¨²nica condici¨®n de no ser entregados a su vez a las Fuerzas Armadas que controlan el ¨¢rea y reincorpor¨¢ndose as¨ª a las comunidades rurales de las que salieron.

Informes procedentes de la convulsionada zona ayacuchana, cuna y campo de batalla del senderismo desde hace una d¨¦cada, insisten en se?alar que 'campesinos incorporados a la fuerza por el senderismo y miembros de estas huestes rebeldes se vienen entregando a las rondas campesinas de los distritos ayacuchanos de Huamanquilla y Luricocha y en la regi¨®n de Huancavelica.El retorno de estos campesinos a sus comunidades coincid¨ªa as¨ª, semanas antes y ahora, con lo expresado en un volante del que a¨²n se duda su autenticidad, el cual circul¨® el pasado 17 de mayo en la ciudad de Ayacucho, d¨ªa en el que el grupo sedicioso cumpl¨ªa 10 a?os de actividad subversiva, y en el que una supuesta facci¨®n senderista se declaraba en tregua para reflexionar despu¨¦s de hacer duras cr¨ªticas al monol¨ªtico movimiento que lidera desde la clandestinidad el ex profesor de filosof¨ªa Abimael Guzm¨¢n Reynoso, conocido como presidente Gonzalo.

El ¨²ltimo fin de semana el presidente Alan Garc¨ªa se mostr¨® incr¨¦dulo sobre la entrega de armas de Sendero Luminoso, aunque afirm¨® que "existen profundas controversias entre los senderistas", y elogi¨® las actividades de las rondas campesinas.

Nueva proclama

Las ¨²nicas reacciones senderistas manifestadas hasta ahora, despu¨¦s del comunicado de Ayacucho, fue la producida en la capital provincial de Huancallo a los tres d¨ªas del aniversario rebelde, cuando grupos de desconocidos tomaron simult¨¢neamente cuatro emisoras y los altavoces del mercado local para divulgar 10 minutos de proclama. En ella los supuestos senderistas aseguraron que reemprender¨ªan las acciones violentas de siempre pero con m¨¢s fuerza.En tono de alerta, el mensaje senderista de Huancallo indica: "Ahora sabr¨¢n qui¨¦nes somos nosotros. Vamos a seguir luchando. Nuestra mira inmediata es frustrar las elecciones en la segunda vuelta".

Aunque en ning¨²n momento se habla de combatientes con armas que se est¨¦n rindiendo, los t¨¦rminos usados por los informes hablan de "centenares" y de "masiva rendici¨®n" senderista en algunos casos.

Uno de los supuestos desertores senderistas -el camarada Pilsen- declar¨® a la prensa lime?a que hab¨ªa abandonado las filas senderistas "porque mi religi¨®n no me permite matar. Varias veces estuve a punto de morir de hambre. No s¨¦ para qu¨¦ esa guerra...". Seg¨²n el sender¨®logo Ra¨²l Gonz¨¢lez, de darse estas deserciones "los desertores se entregan a la misma violencia pero al rev¨¦s", ya que uno de los Fen¨®menos registrados actualmente en Ayacucho, luego de 10 a?os de violencia senderista y de guerra contrainsurgente, es la proliferaci¨®n de rondas campesinas armadas que "ven senderistas por todas partes y que pueden matar a cualquiera".