Sadam, el 'Saladino' de los territorios ocupados
La alianza entre Arafat y Bagdad refuerza las tesis antipalestinas en Israel
El presidente George Bush tiene prisa. Prisa por reunir un contingente de sus soldados en Arabia Saud¨ª para hacer frente al poderoso ej¨¦rcito iraqu¨ª del otro lado de la frontera. Prisa por hacer entrar en raz¨®n al rey Hussein de Jordania para poder cerrar en Aqaba la ¨²ltima brecha del bloqueo. Prisa por doblegar a Sadam Husein antes de que su frente antiiraqu¨ª empiece a flaquear. La propuesta de Husein de convocar una conferencia internacional para tratar todos los conflictos en Oriente Pr¨®ximo, incluido el palestino, pone en una posici¨®n inc¨®moda a Siria y Egipto, aliados de EE UU.
Exceptuando al Reino Unido, los europeos opinan que EE UU ha ido un poco deprisa y ha rebasado el mandato del Consejo de Seguridad al imponer un bloqueo naval a Irak. Por otra parte, la propuesta de convocar una conferencia internacional que se ocupara de todos los conflictos de Oriente Pr¨®ximo, incluyendo el conflicto ¨¢rabe-israel¨ª -propuesta que ha sido presentada al presidente Bush por el rey Hussein, en nombre de Sadam Husein-, encaja con el enfoque tradicional europeo.Si pudieran negociarse paralelamente la retirada de las tropas israel¨ªes de los territorios ¨¢rabes ocupados, la evacuaci¨®n de L¨ªbano por los sirios, la retirada de los iraqu¨ªes de Kuwait y la de EE UU de Arabia Saud¨ª, las perspectivas de estabilidad y paz en Oriente Pr¨®ximo ser¨ªan mucho mayores. La retirada unilateral de Irak del territorio iran¨ª conquistado en la guerra de 1980 a 1988 ha sorprendido a Washington. Husein podr¨¢ retirar ahora numerosas divisiones (se habla de 30.000 hombres) concentradas a lo largo de la frontera irano-iraqu¨ª, y enviarlas al Sur, frente a las tropas de EE UU en Arabla Saud¨ª.
Esta nueva maniobra de Bagdad muestra que Husein est¨¢ lejos de agotar sus recursos y no debe subestimarse su fuerza. Adem¨¢s, cuenta con poder transportar sus mercanc¨ªas, y puede que su petr¨®leo, a trav¨¦s de Ir¨¢n. "Sadam juega sus ¨²ltimas cartas", afirman los expertos israel¨ªes, para los que la reconciliaci¨®n con Ir¨¢n, buscada por Irak, refleja "la "desesperaci¨®n del carnicero de Bagdad". "Sadam ha capitulado frente a todas las exigencias de Teher¨¢n sin tener la menor certidumbre de que podr¨¢ utilizar, tal como espera, los puertos iran¨ªes para romper el bloqueo norteamericano", prosiguen los citados expertos.
"Solamente un hombre acorralado arriesgar¨ªa las ganancias territoriales, penosamente arrancadas tras terribles sacrificios -al menos 350.000 iraqu¨ªes muertos- en una larga y fatigosa guerra de ocho a?os. Si falla en su intento, Sadam Husein sabe que nada bueno le espera por parte de los generales y coroneles iraqu¨ªes", concluyen. Husein va ganando puntos al lanzar una tras otra sus propuestas diplom¨¢ticas contra Bush. Y no solamente en Europa; tambi¨¦n, y, sobre todo, en el mundo ¨¢rabe.
Aliados ¨¢rabes de EE UU
No resultar¨¢ f¨¢cil para los dirigentes egipcios y sirios -aliados de EE UU contra Irak- explicar a sus ciudadanos por qu¨¦ hay que rechazar la propuesta iraqu¨ª de una conferencia internacional. ?C¨®mo oponerse a una conferencia que trata, entre otras cosas, de poner fin a la ocupaci¨®n israel¨ª de los territorios palestinos de Cisjordania y Gaza, de los territorios sirios de la meseta del Gol¨¢n y de los territorios libaneses de la zona de seguridad israel¨ª del sur de L¨ªbano? Sobre todo, porque Mubarak y Asad siempre fueron favorables a una conferencia internacional para solucionar el conflicto con Israel.
En todas partes, los palestinos aplauden al nuevo Saladino, al "nuevo h¨¦roe nacional ¨¢rabe que se llama Sadam Husein". Tras 23 a?os de ocupaci¨®n, y sin vislumbrar el menor rayo de luz al final del t¨²nel, la entrada de Sadam en escena les inspira un entusiasmo sin l¨ªmites.
Decepcionados por la interminable y f¨²til prenegociaci¨®n con Estados Unidos, ven, o quieren ver, en el hombre de Bagdad a su salvador, un h¨¦roe que ha enderezado la columna vertebral del mundo ¨¢rabe, manteniendo a raya a los norteamericanos y al poderoso mundo occidental.
Muchos israel¨ªes, sobre todo aquellos que creen en el di¨¢logo con la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OPEP) se muestran catastrofistas ante la popularidad de Sadam en los territorios ocupados. Reprochan a los dirigentes palestinos locales el no ver que el abrazo entre Arafat y Sadam ha reforzado considerablemente las tesis antipalestinas ante la opini¨®n p¨²blica israel¨ª. Tambi¨¦n les reprochan haber ignorado el atropello de Sadam contra un "pa¨ªs ¨¢rabe amigo".
A decir verdad, los palestinos no tienen simpat¨ªa alguna por la familia real kuwait¨ª que Bush quiere reinstaurar en el poder. Centenares de miles de palestinos han trabajado en Kuwait, en Arabia Saud¨ª y en el Golfo. No perdonar¨¢n a estos riqu¨ªsimos y arrogantes pr¨ªncipes y emires que les explotaron sin piedad y sin concederles los derechos m¨¢s elementales.
Al entrar en Kuwait, Sadam ha encontrado miles de palestinos. "No podemos olvidar que, en lugar de venir en ayuda de la industria palestina subdesarrollada, los emires de Kuwait han preferido invertir cerca de 200.000 millones de d¨®lares en Occidente para ganar m¨¢s y m¨¢s dinero", nos dice Hanna Siniora, redactora jefa del diario palestino El Fajr.
"?Piensa usted que Bush habr¨ªa enviado su flota si Kuwait y Arabia Saud¨ª fuesen como L¨ªbano, un pa¨ªs sin petr¨®leo?", dice un librero palestino de Jerusal¨¦n este. "Estados Unidos habr¨ªa protestado contra la invasi¨®n de Kuwait, como lo hicieron cuando la invasi¨®n israel¨ª de L¨ªbano; pero nada m¨¢s", a?ade al concluir: "Los norteamericanos luchan por el petr¨®leo, no por la moral, y nadie aqu¨ª cree una palabra del lenguaje humanitario con que Bush pretende justificar su intervenci¨®n militar en el Golfo".
Numerosos partidarios del di¨¢logo y de la paz con los palestinos en Israel estiman que, sea cual sea el desenlace del pulso entre Estados Unidos e Irak, los principales perdedores de la crisis ser¨¢n, una vez m¨¢s, los palestinos, cuyas esperanzas de libertad e independencia ser¨¢n aplazadas sin fecha determinada.
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