De Klerk negocia con el l¨ªder zul¨² Buthelezi el fin de las luchas ¨¦tnicas
El presidente surafricano, Frederik de Klerk, y el l¨ªder zul¨², Mangosuthu Buthelezi, celebraron ayer en Pretoria una reuni¨®n urgente para tratar de los enfrentamientos ¨¦tnicos que desde hace ocho d¨ªas se libran en los suburbios negros de Johanesburgo y que hasta el momento se han cobrado 399 muertos. Buthelezi es el dirigente de Inkhata, la organizaci¨®n pol¨ªtica cuyos seguidores -mayoritariamente zul¨²es- protagonizan las batallas frente a los seguidores del nacionalista Congreso Nacional Africano de Nelson Mandela.
Buthelezi declar¨® ayer que el ba?o de sangre que sacude la provincia de Natal y las barriadas negras "se halla en gran parte fuera de control".Numerosos polic¨ªas y soldados han sido desplegados en los suburbios, en un esfuerzo por detener la lucha entre zul¨²es y nacionalistas. A pesar de que la situaci¨®n ha sido de calma en las ¨²ltimas 36 horas, la polic¨ªa sigue encontrando los cuerpos de asesinados a golpes de machete o quemados.
Antes de encontrarse con De Klerk, Buthelezi se reuni¨® con el dirigente de Transkei, el general Bantu Holomisa, quien tambi¨¦n se ha desplazado a Pretor¨ªa por petici¨®n urgente del Gobierno para encontrarse con el ministro Roelof Botha y el ministro del Interior, Adriaan Vlok.
Transkei -uno de los primeros homelands a los que se concedi¨® la independencia en el marco de legislaci¨®n del sistema de discriminaci¨®n racial- es el ¨¢rea de los xhosa, la tribu a la que pertenece Nelson Mandela y muchos de cuyos miembros han participado en las batallas que han tenido lugar en los ¨²ltimos d¨ªas.
Tras la reuni¨®n, Holomisa amenaz¨® con enviar "protecci¨®n" desde el Transkei a las barriadas negras si la violencia contra sus ciudadanos contin¨²a. "Transkei estar¨ªa moralmente obligado a venir y proteger a nuestra gente aqu¨ª", declar¨® Holomisa ante la prensa. "Se resistir¨¢ a toda costa a cualquier intento deliberado de aplastar a transkeianos en Sur¨¢frica", a?adi¨®.
Holomisa acus¨® a la polic¨ªa de fracasar en la protecci¨®n de los residentes de los suburbios, en su mayor¨ªas adeptos del ANC, y de apoyar a los guerreros zul¨²es de Inkhata.
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