Se inicia en Estados Unidos el primer juicio contra un museo por obscenidad

Dennis Barrie, el responsable del Centro de Arte Contempor¨¢neo de Cincinnati que organiz¨® en el mes de abril una exposici¨®n de? fot¨®grafo Robert Mapplethorpe, fallecido el a?o pasado de sida, se sent¨® ayer en el banquillo de los acusados. Barrie y el propio museo fueron procesados el 6 de septiembre por haber expuesto en la pinacoteca cinco fotogramas consideradas "obscenas". El juicio, el primero en la historia de Estados Unidos en que se juzga a un museo, se ha convertido en un proceso contra la libertad de expresi¨®n y en el punto l¨ªmite de la pol¨¦mica sobre el arte y la obscenidad.

Para muchos artistas estadounidenses el caso Barrie representa un nuevo ejemplo del intento de las instituciones p¨²blicas de coartar la libertad de expresi¨®n. Para los sectores m¨¢s ,conservadores, el proceso de Cincinnati es el primer intento judicial para frenar la corriente art¨ªstica que cruza "sistem¨¢ticamente" la l¨ªnea de lo que los conservadores denominan "permisible".Barrie, consagrado por los sectores vanguardistas y m¨¢s liberales como "un aut¨¦ntico h¨¦roe" y como . un m¨¢rtir", ha explicado que representa "al mundo art¨ªstico norteamericano" y ha reconocido que se trata de un "trabajo duro", pero que se siente "orgulloso".

El director del Centro de Arte Contempor¨¢neo de Cincinnati asisti¨® ayer a la primera sesi¨®n del juicio. La jornada se inici¨® con el proceso de elecci¨®n de los miembros del jurado, que podr¨ªa quedar constituido hoy mismo. A pesar de que muchos piensan que Barrie y el museo ser¨¢n absueltos, el abogado defensor, Louis Sirkin, opina que el proceso, que se prolongar¨¢ durante unos diez d¨ªas, ser¨¢ "muy dif¨ªcil".

Mientras se desarrollaba el proceso de selecci¨®n de los ocho miembros del jurado 200 personas se manifestaron en los alrededores del Hamilton County Municipal Court. Los manifestantes reclamaron un mayor respeto a la libertad de expresi¨®n y a los colectivos gay.

Sirkin ha declarado que el procesamiento fue una decisi¨®n "intelectualmente equivocada e incre¨ªble" y que vulnera "la libertad de expresi¨®n que garantiza la Primera Enmienda de la Constituci¨®n". El abogado ha calificado a Mapplethorpe como "un artista de tremendo m¨¦rito" y ha explicado que cuando ha tenido que enfrentarse a juicios de este tipo ha utilizado la misma t¨¢ctica. "Siempre he dicho al jurado que si empleaba la censura a la hora de emitir un veredicto, esta sociedad dar¨ªa el primer paso para condenar ma?ana a una biblioteca o a un museo", ha declarado el abogado.

El director del museo se enfrenta a dos procesos por tenencia de material obsceno y se enfrenta a una pena de seis a 12 meses de c¨¢rcel y una multa de 1.000 d¨®lares (98.000 pesetas). El juez le acusa de colgar de las paredes del museo cinco fotograf¨ªas "obscenas". El auto de procesamiento, firmado por David Albanese, indica que las fotos son materiales independientes mostrados al p¨²blico gracias a la propia exposici¨®n, que sirvi¨® de "veh¨ªculo" para atentar presuntamente contra la legislaci¨®n federal.

La exposici¨®n, titulada Robert Mapplethorpe, de Perfect Moment, montada en Cincinnati, atrajo a 8 1.000 personas y es la misma que se cancel¨® en la Corcoran Gallery de Washington en verano de -1989. La muestra, una colecci¨®n de fotograf¨ªas er¨®ticas con contenido sadomasoquista, se est¨¢ exhibiendo ahora en Boston.

Presi¨®n oficial

Barrie no es la primera v¨ªctima de la campa?a lanzada por los conservadores contra el denominado arte-obsceno. Grupos de rap, pintores y actores de teatro han sufrido ya la presi¨®n oficial' El reparto de ayudas oficiales se somete desde hace un a?o a revisiones que han sido consideradas entre los artistas como "censuras encubiertas".Est¨¢ previsto que el Congreso reanude en octubre el debate sobre la obscenidad. El pasado 25 de julio, el presidente de la C¨¢mara de representantes, Thomas S. Foley, aplaz¨® el debate porque el volumen de ruegos y preguntas era tan grande que la discusi¨®n hubiera alterado el programa estival de los congresistas. A pesar de que no se conoce la fecha exacta del inicio del debate se sospecha que los congresistas establecer¨¢n controles para frenar las ayudas oficiales.

Dennis Barrie opina que su ciudad es "una ciudad conservadora", pero que lo que est¨¢ ocurriendo en Cincinnati podr¨ªa pasar "en otras muchas ciudades de este pa¨ªs.

La pol¨¦mica ha alcanzado incluso al presidente George Bush, quien ha explicado que se opone a la censura del arte, pero reconoce que se siente " profundamente ofendido por alguna de las basuras" que ha visto y que han sido "subvencionadas con dinero p¨²blico".