Los tres novilleros se quejan de la actitud del p¨²blico

Los tres novilleros coincid¨ªan en declarar, al t¨¦rmino del festejo, que la actitud del p¨²blico hacia ellos les molest¨® e impidi¨® su lucimiento. Mientras a Caballero y Jim¨¦nez este hecho les parec¨ªa completamente negativo, Finito destacaba su lado positivo: "Los gritos, aunque te descentren, significan que te exigen ya como a una figura, lo que me encanta".

Finito a?ad¨ªa que desde que hizo el pase¨ªllo not¨® un ambiente muy raro: "Nada m¨¢s empezar me lo coment¨® Caballero y no me lo cre¨ª, pero luego vi que ten¨ªa raz¨®n". Sus cr¨ªticas se centraban en un sector, que no quer¨ªa precisar, "porque todo el mundo sabe cual es", explicaba, para agregar: "Supongo que se habr¨¢n sentido muy satisfechos cuando han logrado que me devolvieran al corral al sexto, con la paradoja de que el sobrero, que era mas peque?o, lo protestaron menos".

El cordob¨¦s entend¨ªa que le pitaran tras matar a ¨¦ste, pero no la desaprobaci¨®n del comentado sector tras acabar con el tercero: "A ese, aunque ten¨ªa poco recorrido y echaba la cara alta, le he toreado muy a gusto y creo que bien, digan lo que digan". Finalizaba se?alando que tomar¨¢ la alternativa en la feria cordobesa del mayo pr¨®ximo y que no piensa venir antes a despedirse como novillero en Las Ventas.

Caballero confirmaba su conversaci¨®n con Finito porque encontr¨® al p¨²blico muy revuelto: "Y muy distinto conmigo a c¨®mo se portaron en la feria de San Isidro, cosa que entiendo porque desde entonces he toreado bastante y se me debe exigir m¨¢s, pero, aunque le respeto, en mi opini¨®n se han pasado porque estuvieron en contra nuestra toda la tarde y as¨ª es dif¨ªcil centrarse".

Tambi¨¦n cre¨ªa que estuvo bien ante su primero, al que calificaba de brusco y soso: "Lo ¨²nico que tal vez me falt¨® fue enfadarme un poquito m¨¢s con ¨¦l". Al quinto presum¨ªa de haberlo sometido: "Le pude, pese a su mansedumbre y peligro, a base de tragar mucho y exponer".

La desmoralizaci¨®n de Jim¨¦nez

Mariano Jim¨¦nez se manifestaba en t¨¦rminos similares, aunque con menor acritud que sus compa?eros, y una evidente desmoralizaci¨®n: "Estoy destrozado porque me jugaba mucho y ha salido todo al rev¨¦s". Dec¨ªa ser una persona muy sensible, a la que influyeron las voces en contra que oy¨® mientras toreaba. Con pocas ganas de hablar, conclu¨ªa: "Conf¨ªo en que la cr¨ªtica valore lo que no hizo el p¨²blico, que he actuado menos que Finito y Caballero, ya en la cumbre, y a los que esto no influir¨¢ nada, mientras que a m¨ª puede hundirme".El presidente, Marcelino Moronta, ten¨ªa su particular teor¨ªa sobre el comportamiento de los novillos: "No devolv¨ª m¨¢s al corral porque a mi juicio no estaban inv¨¢lidos. Si se ca¨ªan era por falta de casta, no de fuerzas".