Ricardo Gull¨®n ingresa en la Real Academia Espa?ola

Generaci¨®n del 98 es un concepto fr¨ªo, pol¨ªtico, que no tiene nada que ver con la literatura, comentaba ayer Ricardo Gull¨®n, con su buen humor habitual, horas antes de pronunciar su discurso de ingreso sobre Juan Ram¨®n Jim¨¦nez en 1903, el a?o de las Arias tristes. Gull¨®n, de 82 a?os, autor de una vasta obra de cr¨ªtica literaria a caballo entre el periodismo y la academia, tom¨® posesi¨®n del sill¨®n C, para el que fue elegido el ¨²ltimo diciembre, en lo que supone un refuerzo de las bancadas de los estudiosos frente a los creadores. El acto cont¨® con la asistencia del pr¨ªncipe Felipe.

"Yo he publicado cuatro libros sobre Antonio Machado, de modo que est¨¢ probada mi admiraci¨®n por ¨¦l. Pero Juan Ram¨®n Jim¨¦nez es un genio", dice Gull¨®n . "Me parece el poeta m¨¢s importante de su ¨¦poca: Su registro es tan ampl¨ªo que parece incre¨ªble... Tenga usted en cuenta que Juan Ram¨®n fue el ¨²nico premio Nobel espa?ol propuesto por un organismo extranjero, la universidad de Maryland, que con su nombre bautiz¨® el departamento de lenguas. Ha sido muy traducido y es muy conocido en el extranjero. Cuando viaj¨® a Am¨¦rica, en Buenos Aires y Montevideo le acogieron como un torero..."Presagios

Exiliado ¨¦l mismo durante tres d¨¦cadas en universidades norteamericanas, Gull¨®n dispone, en su memoria y en sus archivadores, de una de las principales memorias de la literatura espa?ola de este siglo. Cuenta con infinidad de documentos, principalmente cartas, y de una gran cantidad de recuerdos que ya ten¨ªa ordenados en forma de libro cuando le robaron la mitad en la universidad de Texas. Ahora intenta recuperar los detalles, las esquinas de sus recuerdos que el olvido le intenta estafar. Gull¨®n es autor de 32 libros y casi 900 art¨ªculos.

Aqu¨¦l de 1903 fue un a?o notable, evoca Gull¨®n, por cuanto estuvo lleno de presagios que luego se habr¨ªan de confirmar. Murieron Sagasta y Gastar N¨²?ez de Arce, y tambi¨¦n el progresista Le¨®n XIII para ser sustitu¨ªdo en el sollo pontificio por el cardenal Sarto, P¨ªo X, que no hab¨ªa de serlo demasiado. Valle-Incl¨¢n public¨® por esos a?os sus Sonatas, Baroja su Mayorazgo de Labraz y Benavente, La noche del s¨¢bado. Desde el Siglo de Oro no se ve¨ªa nada parecido, y asi se explica que Jos¨¦ Carlos Mainer haya hablado de la edad de plata de la literatura espa?ola.

"Juan Ram¨®n no iniciaba nunca un ataque, pero tampoco dejaba pasar uno", coment¨® Ricardo Gull¨®n a prop¨®sito del car¨¢cter susceptible del poeta. "De Juan Ram¨®n se han dicho cosas muy villanas".

Propietario de una grande y s¨®lida salud, Gull¨®n se hab¨ªa propuesto jubilarse como profesor de universidades norteamericanas a los 80 a?os, pero no pudo por dos ataques al coraz¨®n. "Hoy quiz¨¢ no pueda correr contra un joven, pero s¨ª puedo desafiarle a competir al juego de las siete y media, en el que soy un experto, o al julepe".

El sobrio espacio del sal¨®n de sesiones de la Real Academia se encontraba ayer concurrido por una considerable cantidad de escritores, como por ejemplo, Rosa Chacel, Jos¨¦ Hierro y Jos¨¦ Caballero Bonald, adem¨¢s de los integrantes del llamado grupo de Le¨®n, de donde el nuevo acad¨¦mico: Jos¨¦ Mar¨ªa Merino, Luis Mateo D¨ªez y Juan Pedro Aparicio, adem¨¢s de los dos pol¨ªticos locales, Fernando Su¨¢rez y el ex ministro Rodolfo Mart¨ªn ViIla.

A la entrada de la Espa?ola, un grupo de estudiantes, disc¨ªpulos de Gull¨®n, quisieron que constara su protesta porque no les hab¨ªan dejado entrar.