T¨¦cnicos de la Administraci¨®n admiten que en Espa?a hay miles de vertederos incontrolados

"La gesti¨®n de los residuos t¨®xicos es un problema tan acuciante que, si no se construye una planta para incinerar esos desechos, el territorio espa?ol se va a poblar de puntos negros contaminados". T¨¦cnicos de la Administraci¨®n y de la empresa privada encargados de la gesti¨®n de los residuos t¨®xicos admitieron, en una reuni¨®n organizada por el Instituto de Formaci¨®n y Desarrollo, que en el territorio nacional puede haber hasta 100.000 vertederos incontrolados. Encuadrado en el Plan de Residuos Industriales de 1989, se va a hacer un inventario de suelos contaminados en Espa?a.

El citado inventarlo ha salido a concurso p¨²blico en estos d¨ªas y se espera completarlo en 1991. La Administraci¨®n va a invertir en ¨¦l 350 millones de pesetas. Una vez concluido el estudio, y en funci¨®n de los riesgos para la poblaci¨®n, se proceder¨¢ a aislar los terrenos m¨¢s contaminados o se tratar¨¢ de descontaminarlos, "sobre todo si est¨¢n junto a edificios o colegios dice Jos¨¦ Hern¨¢ndez Nieto, jefe del servicio de gesti¨®n de residuos de la Secretar¨ªa General de Medio Ambiente del Ministerio de Obras P¨²blicas (MOPU).Este t¨¦cnico cree que la cantidad de puntos negros existentes en Espa?a es desorbitada "aunque a¨²n no hemos llegado a los niveles de EE UU y de otros pa¨ªses de Europa, donde un gran porcentaje de los suelos urbanizados se hallan fuertemente contaminados". Juan Mazarrasa, presidente de la Empresa Nacional de Gesti¨®n de Residuos Industriales (Engrisa), afirma: "Estamos enterrando millones de toneladas de residuos t¨®xicos sin saber lo que estamos dejando ah¨ª a las pr¨®ximas generaciones".

Ineficacia

Mazarrasa manifiesta que la Administraci¨®n medioambiental espa?ola es "raqu¨ªtica e ineficaz", porque en gran parte estas competencias est¨¢n transferidas a las autonom¨ªas y Ias autoridades no presionan para resolver estos problemas, porque tienen otras prioridades. Hay que dimensionar las administraciones medioambientales y esforzarse en invertir en instalaciones de tratamiento e incineraci¨®n. Pero el mayor problema es que a nivel pol¨ªtico existe una gran inmadurez a la hora de tomar decisiones para ubicar estas instalaciones".Jes¨²s Garc¨ªa, asesor legal de la Secretar¨ªa General de Medio Ambiente del MOPU, no duda en afirmar que "no hay m¨¢s Administraci¨®n medioambiental porque el pueblo no la reclama. El pueblo tiene la Administraci¨®n que se merece". Garc¨ªa piensa que la aplicaci¨®n eficaz del reglamento de residuos es casi una utop¨ªa. "La pol¨ªtica de sanciones a las empresas que contaminan, por ejemplo, no es factible, porque todos los expedientes sancionadores se recurren sistem¨¢ticamente o quedan aparcados en los tribunales de justicia". Los t¨¦cnicos coinciden en que la actual reglamentaci¨®n sobre residuos industriales tiene deficiencias importantes de tipo t¨¦cnico que deber¨ªan modificarse.

"Tenemos 1.800.000 toneladas de desechos peligrosos cada a?o y una capacidad cero de gesti¨®n, y adem¨¢s importamos residuos. Es urgente instalar una planta de incineraci¨®n de desechos. No podemos seguir esperando, por miedo, a una contestaci¨®n social, que adem¨¢s es totalmente injustificada. La incineraci¨®n en Espa?a de residuos industriales y s¨®lidos urbanos nos ahorrar¨ªa una planta nuclear de 1.000 megavatios y el 2% de la factura del petr¨®leo", dice Mazarrasa.

Educar a la poblaci¨®n

Carlos Piedra, director del laboratorio ACT, dedicado a la caracterizaci¨®n de residuos t¨®xicos, considera, al igual que los t¨¦cnicos mencionados, que es esencial informar y educar a la poblaci¨®n sobre estos problemas. Piedra insiste en que el actual reglamento legal sobre residuos t¨®xicos contiene importantes deficiencias t¨¦cnicas, sobre todo en el apartado de la caracterizaci¨®n de los mismos."Las autoridades auton¨®micas desconocen la ley, y se est¨¢n incinerando residuos con total desconocimiento de su composici¨®n y sus efectos. En este sentido se hacen aut¨¦nticas burradas y no es extra?o que el ¨ªndice de parejas est¨¦riles sea cada vez m¨¢s alarmante, o que cada d¨ªa haya m¨¢s efectos genot¨®xicos o ¨ªndices m¨¢s altos de c¨¢ncer entre la poblaci¨®n. Hay muchos industriales que desconocen todo sobre los residuos y los mezclan, lo que est¨¢ prohibido por la ley, y no los agitan de casualidad". Por todo ello, Piedra cree que es esencial crear una cadena de custodia de los residuos.

La Administraci¨®n estudia la posibilidad de incinerar residuos t¨®xicos no organoclorados en las cementeras, como hacen otros pa¨ªses. Aunque se llegara a esta soluci¨®n, no ser¨ªa suficiente, seg¨²n Mazarrasa, porque estas plantas no podr¨ªan ocuparse de todos los residuos t¨®xicos, que en un 80% son policlorobifenilos (PCB) o compuestos halogenados.