Juan Pablo II anuncia una enc¨ªclica sobre la justicia social en el mundo moderno
Juan Pablo II anunci¨® por sorpresa en la ma?ana de ayer, durante la celebraci¨®n de la misa en San Pedro, la promulgaci¨®n de una nueva enc¨ªclica sobre la justicia social, que actualizar¨¢ la centenaria Rerum novarum, de Le¨®n XIII. Al felicitar al mundo entero el A?o Nuevo durante el rezo del ¨¢ngelus desde la ventana de su despacho que se asoma a la plaza de San Pedro record¨® el conflicto en Oriente Pr¨®ximo e hizo votos para que 1991 "sea para todos un a?o de paz y no de guerra"
El Papa record¨® que 1991 es el centenario de la famosa enc¨ªclica Rerum Novarum, de Le¨®n XIII -el primer documento de un Papa sobre la condici¨®n social de los obreros-, para proclamar este a?o que empieza como el "a?o de la justicia social" para la Iglesia cat¨®lica.Al mismo tiempo revel¨® que est¨¢ a punto de publicar una nueva enc¨ªclica que, arrancando de la cuesti¨®n de la justicia social que Le¨®n XIII abord¨® hace 100 a?os, desarrollar¨¢ los aspectos que sobre dicho problema se replantea hoy el mundo moderno.
El anuncio de una nueva enc¨ªclica social escrita por el Papa polaco, en el momento en que se desploman los reg¨ªmenes del bloque comunista, ha causado sorpresa y curiosidad incluso en los ambientes eclesi¨¢sticos romanos. Se sab¨ªa, en efecto, que Juan Pablo II ten¨ªa la intenci¨®n de promulgar una enc¨ªclica, pero se cre¨ªa que iba a estar centrada en temas de ¨¦tica moral y no sobre la justicia social.
La enc¨ªclica Rerum Novarum, promulgada el 15 de mayo de 1891, podr¨ªa parecer conservadora a los ojos de hoy porque hablaba no s¨®lo de los derechos de los trabajadores a obtener, por ejemplo, un salario digno, sino tambi¨¦n de los deberes de los obreros para con el empresario, al mismo tiempo que hac¨ªa una gran defensa de la propiedad privada.
Enc¨ªclica "escandalosa"
Y, sin embargo, fue la primera tentativa de la Iglesia cat¨®lica de abrir un di¨¢logo entre el trabajador y su patr¨®n, impulsando al mismo tiempo el asociacionismo cristiano de los obreros para atajar el auge de las asociaciones sindicales marxistas. En Italia, donde el campo de la justicia social estaba a¨²n muy rezagado en aquel tiempo, la enc¨ªclica de Le¨®n XIII fue casi un esc¨¢ndalo y debi¨® ser escrita tres veces.El papa Wojtyla -cuyo pontificado, fuertemente conservador en materia de dogma y de moral, siempre se ha caracterizado, por el contrario, por una cierta apertura en lo social, al haber recordado ¨¦l mismo muchas veces su condici¨®n de obrero cuando era joven- ha querido ahora aggiornare (actualizar) aquella primera enc¨ªclica social de la Iglesia, afirmando que en ella va a abordar todas aquellas materias que la Rerum Novarum no pudo tocar simplemente porque no exist¨ªan.
El hecho de que Juan Pablo II haya querido hacer una enc¨ªclica y no un simple "documento pontificio" para conmemorar el centenario de la de su predecesor es la mejor demostraci¨®n de la importancia que ha querido darle a la cuesti¨®n social, ya que una enc¨ªclica, sin ser dogma de fe, es el documento papal de mayor peso y que m¨¢s compromete la conciencia de los creyentes.
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