El 'gordo' se qued¨® ¨ªntegramente en Madrid
La administraci¨®n de loter¨ªa San Jorge en el 329 de la madrile?a calle de Bravo Murillo, no levant¨® ayer su cierre met¨¢lico, a pesar de haber repartido ¨ªntegramente los 7.500 millones del gordo del sorteo de El Ni?o, el 83.241. Las 25 series del n¨²mero premiado se vendieron en su totalidad en ventanilla en d¨¦cimos, ya que ning¨²n cliente de la administraci¨®n estaba abonado, por lo que el gordo qued¨® muy repartido por el barrio de Tetu¨¢n. El segundo premio, el 17.849, se vendi¨® en Puerto Lumbreras (Murcia) y en Las Palmas de Gran Canaria.
Margarita Tonk¨ªn G¨®mez de Membrillera, de 50 a?os y madre de seis hijos, se encontraba haciendo las compras de Reyes mientras ante la puerta de la admistraci¨®n de loter¨ªa que regenta, la n¨²mero 75 de Madrid, se congregaban periodistas, vecinos y curiosos. De la ventanilla de dicha administraci¨®n, atendida por Margarita Tonk¨ªn y por una empleada suya, Mar¨ªa Rosario Mart¨ªnez Cano, hab¨ªan salido las 25 series del 83.241, el gordo del sorteo de El Ni?o de este a?o, dotado con 200 millones de pesetas. En total, San Jorge reparti¨® unos 7.500 millones.Esta era la primera vez que la loter¨ªa de El Ni?o, en su cincuenta aniversario, repart¨ªa 25 premios de cien millones de pesetas a un d¨¦cimo, que recayeron en la fracci¨®n octava de cada serie.
Jos¨¦ P¨¦rez Dur¨¢n, de 58 a?os, esposo de la regente de la administraci¨®n, se acerc¨® hasta el local y all¨ª conoci¨® la fortuna que hab¨ªa repartido. No hab¨ªa o¨ªdo el sorteo por la radio. "No est¨¢ mal como regalo de Reyes", dijo. Record¨® que el 83.241 se vendi¨® en d¨¦cimos en ventanilla, "aunque cost¨® venderlo porque el 1 no es una de las terminaciones que m¨¢s gusten".
San Jorge lleva abierta desde 1956 y hace unos a?os, rememoraba P¨¦rez Dur¨¢n, tambi¨¦n reparti¨® un primer premio de este sorteo. El esposo de la regente de la administraci¨®n lamentaba no haberse quedado con ninguna participaci¨®n del n¨²mero premiado, pero se consolaba porque el gordo haya quedado tan repartido en el barrio.
Mientras Jos¨¦ P¨¦rez Dur¨¢n respond¨ªa a los informadores, unhombre de pelo canoso se le acerc¨® d¨¦cimo en mano y le espet¨®: "?Es ¨¦ste Pepe, es ¨¦ste?". Y era ese, aunque Miguel Manrique, de 66 a?os, ya lo sab¨ªa. Manrique compra loter¨ªa todas las semanas en San Jorge y el d¨ªa de Nochevieja adquiri¨® un d¨¦cimo del 83.241, que le reportar¨¢ 20 millones. Jubilado en diciembre pasado tras regentar m¨¢s de tres d¨¦cadas un peque?o bar de su propiedad, Manrique escuch¨® la retransmisi¨®n radiof¨®nica del sorteo. A cada n¨²mero que cantaban los ni?os de San lldefonso el ve¨ªa su d¨¦cimo: "Son uno, son dos, son tres y as¨ª hasta las cinco cifras del gordo. Miguel Manrique no le hab¨ªa comunicado a¨²n su fortuna a su esposa: "Est¨¢ en el mercado comprando y no s¨¦ como se lo voy a decir Este jubilado sin hijos, uno de los escasos agraciados que se acerc¨® hasta la administraci¨®n 75, a¨²n no ha decidido en qu¨¦ gastar¨¢ su dinero. A la pregunta de si pensaba hacerle un regalo de Reyes especial a su esposa sonri¨® y respondi¨®: "El regalo se lo va a hacer ella".Otro de los agraciados fue Luis Mu?oz Mingo, propietario del bar Mu?oz en el n¨²mero 31 de la calle de Genciana. Mu?oz soltero, cerr¨® el bar al conocer su fortuna y puso en el cristal un cartel con el texto "cerrado por fiesta familiar". El afortunado, a quien seg¨²n sus vecinos le han tocado 20 millones, tampoco se hallaba en su domicilio.
Diez empleados del sal¨®n de bodas Le Petit Paris, pr¨®ximo a la administraci¨®n agraciada, se repartieron otros 40 millones, correspondientes a dos d¨¦cimos. Los camareros y el maitre del sal¨®n conocieron su suerte mientras estaban preparando el local para la cena de Reyes y se acercaron hasta un bar a celebrarlo con cerveza y champ¨¢n, seg¨²n se?alaba uno de los afortunados, el camarero Lorenzo Blanco, "el Bola, me llaman el Bola".
Ninguno de los 25 recompensados con los 100 millones del superpremio quiso, en cambio, dejarse ver.
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