Peter Arnett

Come naranjas, d¨¢tiles, galletas o lo que pesca. Hace 10 d¨ªas que no se ducha, porque no hay agua corriente. Aprovecha las horas de sol segundo a segundo, porque tampoco hay electricidad. El neozeland¨¦s Peter Arnett, de 57 a?os de edad, el corresponsal de guerra de la Cable News Network (CNN), contin¨²a aguantando en Bagdad, y noche tras noche le cuenta al mundo telef¨®nicamente lo que ocurre en la capital de Irak.Quienes le conocen saben que Arnett no podr¨ªa estar en otro lugar. Lo mismo le ocurri¨® en Saig¨®n, donde s¨®lo abandon¨® la oficina de Associated Press cuando el Vietcong le cort¨® la l¨ªnea y la transmisi¨®n era ya imposible. Durante la guerra de Vietnam, Arnett se convirti¨® en una leyenda viva entre los corresponsales.

Arnett lleva 25 a?os viviendo la guerra, y ha visto la muerte y o¨ªdo el sonido de los disparos en todos los rincones del mundo. Vietnam, Laos, Nicaragua, El Salvador, Afganist¨¢n... Arnett ha recibido un Premio Pulitzer y ha descrito magistralmente golpes de Estado, secuestros de aviones, ataques terroristas y estados de sitio, como el de Indonesia en 1963, donde su figura sirvi¨® de inspiraci¨®n para la pel¨ªcula El a?o que vivinios peligrosamente.

En 1980, Associated Press le dio un puesto en Nueva York. Cuando le pidieron un extenso reportaje sobre la Seguridad Social y un informe sobre los hospitales de Manhattan se dio cuenta de que no estaba hecho para aquello. La CNN le dio la posibilidad de volver a la acci¨®n y, Ted Turner consigui¨® el milagro de transformar su periodismo de agencia de noticias en periodismo televisivo.

Durante los primeros bombardeos de Bagdad, Arnett comparti¨® habitaci¨®n con sus compa?eros de emisora Bernard Shaw y John Holliman. Shaw, que abandon¨® Irak en cuanto pudo, ha explicado en Washington que Arnett, durante los primeros ataques, no dejaba de sonre¨ªr. "No te r¨ªas, esto va en serio", le coment¨® Shaw, quien termin¨® descubriendo que la risa era la forma con la que Arnett combat¨ªa el miedo.