"Esta guerra es indigna de los hombres" afirma el Papa

Juan Pablo II dedic¨® las palabras que de ayer dirigi¨® a los fieles concentrados en la plaza de San Pedro a la guerra del Golfo, a la que defini¨® como "indigna de la humanidad", al mismo tiempo que alab¨® a cuantos est¨¢n proponiendo iniciativas para que cese el conflicto. Juan Pablo II pidi¨® expl¨ªcitamente que los responsables del conflicto "abandonen cuanto antes ese camino indigno de la humanidad y busquen con confianza la justicia a trav¨¦s del di¨¢logo y de la negociaci¨®n". El papa Wojtyla estimul¨® a los presentes y a todos los fieles a rezar "por las poblaciones civiles que est¨¢n siendo sometidas a la dura prueba de los bombardeos, que obligan a cientos de miles de personas a abandonar sus casas y su patria para afrontar la tr¨¢gica experiencia de los refugiados". A este respecto, el Papa pidi¨® ayer la solidaridad para con ellos y anunci¨® que el Vaticano participar¨¢ econ¨®micamente para aliviar sus penas.

Preocupado por lo que se ha llamado la guerra de los dioses" en este conflicto, Juan Pablo II concluy¨® ayer sus palabras deseando que cuantos rezan al Dios de las tres religiones presentes en el lugar del conflicto no conviertan dicha fe "en motivo de conflicto, sino en un empe?o de superar con el di¨¢logo lo absurdo de esta guerra".

Juan Pablo II lanz¨®, desde la ventana de su despacho, dos palomas blancas que tom¨® de las manos de un ni?o. Las aves, tras un peque?o vuelo, en vez de dirigirse hacia la gente api?ada en la plaza de San Pedro, retornaron a posarse al lado de la ventana papal. Curiosamente, en Italia por primera vez se est¨¢ leyendo L'Osservatore Romano y se escucha Radio Vaticana, ya que -se considera que dichos ¨®rganos de informaci¨®n de la Santa Sede ofrecen una informaci¨®n menos manipulada.

Abajo, en la plaza, por vez primera asisti¨® a la cita dominical del Papa un nutrido grupo de jud¨ªos, con banderas con la estrella de David y la cabeza cubierta. El Papa pronunci¨® en hebreo el saludo de "Shalom" explicando que significaba "paz" y a?adi¨®, cosa que agrad¨® mucho a los jud¨ªos, que se sent¨ªa cercano a los hijos del "Estado de Israel".

Carnavales en peligro

La guerra del Golfo ha dado un golpe mortal a los famosos carnavales de Venecia, de Viareggio y de Mil¨¢n, donde pr¨¢cticamente han sido prohibidas sus manifestaciones p¨²blicas por los responsables, creando no pocas pol¨¦micas entre la poblaci¨®n y, de manera especial, entre los agentes tur¨ªsticos. Los que han abolido dichos carnavales alegan que la tragedia del Golfo impide permitir una explosi¨®n de alegr¨ªa.

Los que est¨¢n a favor responden que, en un momento de "tal tensi¨®n emotiva" que provoca un aumento de las enfermedades nerviosas, los carnavales pod¨ªan ser una v¨¢lvula de escape.