Felipe Gonz¨¢lez inicia en el Reino Unido su viaje m¨¢s delicado a un pa¨ªs europeo
El presidente Felipe Gonz¨¢lez inicia ma?ana, en Londres, su visita m¨¢s delicada a un pa¨ªs europeo, el Reino Unido, con el que Espa?a mantiene no s¨®lo un contencioso bilateral sobre Gibraltar, sino serias diferencias de, enfoque sobre la contrucci¨®n europea. El viaje, que constituye la devoluci¨®n del que efectu¨¦ a Madrid la primera ministra, Margaret Thatcher, en octubre 1988, ser¨¢ el primero con car¨¢cter oficial de un jefe del Gobierno espa?ol a la capital brit¨¢nica, que Gonz¨¢lez ya visit¨® tres veces para tratar asuntos comunitarios y atl¨¢nticos.
Apalabrado para noviembre pasado el desplazamiento de Gonz¨¢lez tuvo que ser cancelado a causa de la dumisi¨®n de Thatcher, y ahora el presidente espa?ol tendr¨¢ la oportunidad de conocer m¨¢s a fondo a su nuevo hom¨®logo, John Major, que le ha robado el puesto de j¨²nior entre los jefes de Gobierno de los Doce. Major tiene previsto volver este a?o a veranear en ?vila, y se especula a con que podr¨ªa reunirse de nuevo con Gonz¨¢lez.El presidente mantendr¨¢ primero conversaciones con el secretario del Foreign Office, Douglas Hurd, antes de ser recibido en audiencia por la reina Isabel II. Despu¨¦s presidir¨¢ un almuerzo en la residencia del embajador espa?ol ofrecido a hispanistas brit¨¢nicos. Por la tarde, se reunir¨¢ con Major, con el que tambi¨¦n cenar¨¢, mientras, sus ministros de Exteriores y Econom¨ªa har¨¢n otro tanto con sus colegas brit¨¢nicos. A media tarde har¨¢ un hueco para entrevistarse con el l¨ªder de la oposici¨®n laborista, Neil Kinnock, que tras su victoria en los comicios locales reclama elecciones anticipadas.
La jornada del mi¨¦rcoIes empezar¨¢ con una visita a Kew Gardens, conocidos porsus bonsais, y continuar¨¢ con la inaguraci¨®n de la nueva sede de la C¨¢mara de Comercio espa?ol, donde Gonz¨¢lez pronunciar¨¢ un discurso de ¨ªndole econ¨®mica. Antes de recibir a la colonia espa?ola, el presidente se reunir¨¢ por la tarde con la comisi¨®n de asuntos exteriores de la C¨¢rnara de los Comunes.
De Major, al que ya ha tratado en dos cumbre europeas, Gonz¨¢lez opina que sus ademanes son m¨¢s suaves que los de su predecesora en el cargo, con la que comparte, sin embargo, sus recelos a ahondar la integraci¨®n comunitaria, sobre todo en sus vertientes de pol¨ªtica exterior y de seguridad com¨²n. A diferencia de Thatcher, su sucesor parece proclive a tomar iniciativas en el seno de la CE, como le hizo en abril en Luxemburgo, proponiendo la creaci¨®n en el norte de Irak de una zona de seguridad para los kurdos.
Londres y Madrid siguen, no obstante, estando en trincheras enfrentadas en la Comunidad, y es dudoso que la estancia de Gonz¨¢lez acerque sustancialmente a Espa?a con el ¨²nico gran socio europeo con el que no se celebran, por ejemplo, cumbres anuales de jefes de Gobierno. La propuesta espa?ola de creaci¨®n de un fondo de compensaci¨®n interestatal al que el Reino Unido contribuir¨ªa como miembro rico de la CE en beneficio de los pobres, entre los que figura Espa?a, corre el riesgo de alejarles a¨²n mas. De ah¨ª que el presidente no est¨¦ entusiasmado con hacer esta visita.
Aproximaci¨®n monetaria
Entre ambas capitales s¨ª se ha producido, sin embargo, desde el oto?o una inesperada aproximaci¨®n a prop¨®sito de la uni¨®n monetaria de la CE, cuyo ritmo Carlos Solchaga propuso retrasar despu¨¦s de concertarse en Madrid con Major, entonces ministro de Finanzas. En enero Espa?a present¨® en Bruselas una proposici¨®n de ecu reforzado parecida a la brit¨¢nica y bien acogida por su delegaci¨®n.
A nivel bilateral, la relaci¨®n econ¨®mica es equilibrada. El Reino Unido es el quinto suministrador de Espa?a y su cuarto cliente, aunque la ligera recesi¨®n que padece ha provocado en 1990 una ca¨ªda. del 2% de sus importaciones de productos espa?oles, que ascendieron tan s¨®lo a 507.214 millones de pesetas, mientras exportaba 638.000 millones. A pesar de la mala racha que atraviesa, sigue siendo el destino predilecto de los empresarlos espa?oles, que invirtieron en 1990 92.320, millones, la quinta parte de la inversi¨®n espa?ola en el extranjero. La inversi¨®n brit¨¢nica en Espa?a ascendi¨® a 151.117 millones y super¨®, por ejemplo, a la alemana.
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