Espa?a, dispuesta a modificar su posici¨®n

El giro dado por Estados Unidos ante el problema yugoslavo -en el sentido de admitir la autodeterminaci¨®n de Croacia y Eslovenia- y su aproximaci¨®n a la posici¨®n de Alemania, donde las tesis partidarias de la independencia de las rep¨²blicas secesionistas se han abierto camino, ha cogido por sorpresa a la diplomacia espa?ola.Las matizaciones estadounidenses y la discordancia alemana amenazan con agrietar la hasta hace poco monol¨ªtica posici¨®n de la Comunidad Europea, partidaria de que el conflicto yugoslavo se resuelva sin alterar las fronteras establecidas. Esta posici¨®n fue reiterada en Bruselas el pasado martes por la Comisi¨®n Europea, que juega con la baza de la ayuda econ¨®mica para contribuir al mantenimiento de la federaci¨®n de rep¨²blicas.

Con igual Firmeza, el presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, defend¨ªa la integridad territorial de Yugoslavia en su comparecencia en el Congreso el pasado 1 de julio frente a unos partidos nacionalistas prestos a abogar por la soberan¨ªa de Croacia y Eslovenia. Ayer mismo, el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, afirm¨® que la diplomacia espa?ola no era "v¨¢lida" porque no respond¨ªa "al principio de respeto del derecho de los pueblos a d¨ªsponer de ellos mismos".

. Sin embargo, ante el nuevo rumbo que han tomado los acontecimientos, en el Ministerio de Asuntos Exteriores se manten¨ªa ayer un comp¨¢s de espera, con los ojos puestos en Praga. All¨ª, altos funcionarios de la CE se reun¨ªan por la ma?ana para unificar las posiciones antes del encuentro que la Conferencia sobre Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa (CSCE) mantuvo en la capital checoslovaca Dor la tarde.

Matices y divergencias

Los representantes comunitarios no est¨¢n dispuestos a modificar radicalmente sus posiciones y desean que sea Alemania quien introduzca los matices necesarios. Estas conversaciones se prolongar¨¢n en el encuentro que mantendr¨¢n ma?ana en La Haya los ministros comunitarios de Asuntos Exteriores.

El titular espa?ol, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, reconoci¨® ayer la existencia de diferencias en la forma t¨¢ctica y estrat¨¦gica a la hora de abordar la soluci¨®n a la crisis" pero, dijo, "la Comunidad Europea se sigue manifestando con una sola voz". El ministro reafirm¨® la necesidad de la reuni¨®n de La Haya ante el incumplimiento de los acuerdos firmados por las autoridades yugoslavas con la troika comunitaria y el agravamiento de la situaci¨®n. Fernandez Ord¨®fiez, que se mostr¨® especialmente preocupado por la p¨¦rdida del control del poder civil sobre el ej¨¦rcito, ratific¨® la posici¨®n espa?ola de que se respeten la Carta de Par¨ªs y el Acta de Helsinki -que conjugan el derecho de autodeterm ?naci¨®n con el respeto a la integridad territorial- como elementos b¨¢sicos para resolver la crisis.

Lo cierto es que Espa?a no va a mantener una posici¨®n propia al margen de los nuevos rumbos diplom¨¢ticos. Como lo expresaba un alto funcionario de Exteriores: "En tanto los comunitarios giren, tendremos que girar tambi¨¦n. El peso de Alemania dentro de la Comunidad es enorme y tanto eso como los matices estadounidenses pueden crear un efecto domin¨® que termine con la aparente irreversibilidad de las p, osiciones".