"Brecht est¨¢ m¨¢s 'demod¨¦" que Valle"
ENVIADO ESPECIALLas comedias b¨¢rbaras, dirigido por Jorge Lavelli, se divide en dos partes: la primera (9, 11 y 15 de julio) comprende Cara de plata y pr¨¢cticamente la mitad de Aguila de blas¨®n; la segunda (10, 12 y 16 de julio) el resto de Aguila de blas¨®n y Romance de Lobos. El espect¨¢culo, de algo m¨¢s de seis horas de duraci¨®n, puede verse tambi¨¦n ¨ªntegramente (con un intervalo de tres cuartos de hora) los d¨ªas 13 y 17 de julio.
El montaje es una coproducci¨®n entre el Th¨¦?tre National de la Colline (Par¨ªs), el Festival de Avi?¨®n y el Festival de Tardor de Barcelona, que lo programar¨¢ (Mercat de les Flors) del 5 al 9 de octubre. En opini¨®n de su director, tanto la calidad de la traducci¨®n como el excelente reparto, encabezado por Mar¨ªa Casares (Do?a Mar¨ªa) y Michel Aumont (Don Juan Manuel Montenegro), sin olvidar la escenograf¨ªa de Graciela Gal¨¢n y la m¨²sica de Carmelo Bernaola, permiten augurar la definitiva aceptaci¨®n de Valle, como dramaturgo genial, por el p¨²blico franc¨¦s.
Lavelli cree que el momento presente, social y pol¨ªticamente hablando, es m¨¢s beneficioso, para la definitiva aceptaci¨®n de Valle en Francia, que 30 a?os atr¨¢s, cuando el espectador franc¨¦s "ped¨ªa respuestas al teatro", ideol¨®gicas y pol¨ªticas. Con todo, Lavelli se muestra cauto: "La papeleta", dice, "es dif¨ªcil, sigue siendo dif¨ªcil, pero ya no imposible".
Pregunta. Por una serie de razones de muy diversa ¨ªndole, el teatro de Valle no ha corrido en Francia una suerte pareja al de su compatriota Garc¨ªa Lorca. ?Cree usted que esta vez va a conseguirse el objetivo?
Respuesta. Pienso que s¨ª, al menos as¨ª lo espero y deseo. Reconozco que la papeleta es dif¨ªcil, sigue siendo muy dif¨ªcil, pero no ya imposible. Se me ocurre que el momento que vivimos es m¨¢s interesante que cuando se estren¨® la versi¨®n de Jeanine Worms -no vi el espect¨¢culo pero s¨ª le¨ª la traducci¨®n que, entre nosotros, era muy mala: era un lenguaje vanal, pr¨®ximo al teatro de bulevar- y Luces de Bohemia, de Wilson. Entonces al teatro se le ped¨ªan respuestas Hab¨ªa un sistema podrido que hab¨ªa que cambiar por otro mejor, menos podrido. Y el teatro ayudaba a dar con ¨¦l.
Hoy, la respuesta del teatro brechuano nos hace sonreir. En este sentido, esta mucho m¨¢s d¨¦mod¨¦ Brecht que Valle. En el teatro de Valle no hay respuestas; hay interrogantes. El suyo es un teatro decadente, de h¨¦roes negativos. Y ese negativismo es algo muy actual, es algo que est¨¢ de moda, como la destrucci¨®n, la masacre. Entre Bernhard y Valle, a pesar de su gran diferencia de estilos, hay una relaci¨®n evidente un claro parentesco. Pienso que la metamorfosis que experimenta el personaje de don Juan Manuel Montenegro, su cuestionamiento interior es algo muy actual.
Referencias
P. ?Cree usted que el mito de Don Juan, Montenegro visto como un Don Juan galaico, como lo ve¨ªa Valle, puede ser una buena referencia para el p¨²blico franc¨¦s?
R. Evidentemente. El mito de Don Juan es algo que est¨¢ impl¨ªcito en la obra, hasta tal punto que no me ha parecido necesario destacarlo en el programa de mano. Lo que ocurre es que el p¨²blico franc¨¦s desconoce el Don Juan espa?ol, que es muy distinto del franc¨¦s, del de Moli¨¨re. Lo mismo que con el Fausto de Goethe, otra referencia posible, junto con Shakespeare, en cuanto lo que la obra de Valle tiene de visi¨®n global del mundo. Los franceses s¨®lo conocen el Fausto de Gounod, que es una versi¨®n rid¨ªcula del de Goethe.
De ah¨ª esa dificultad a la que me refer¨ªa antes, m, cautela a lanzar las campanas al vuelo. Valle es un autor genial, un gallego ¨²nico, y el p¨²blico franc¨¦s no est¨¢ acostumbrado a ver ese teatro, tambi¨¦n ¨²nico, en el que un personaje habla con un muerto o con una visi¨®n. Tuve la oportunidad de estrenar esas Comedias b¨¢rbaras en Alemania, en alem¨¢n, pero me pareci¨® demasiado ex¨®tico. En Alemania hay m¨¢s curiosidad por ver lo que ocurre en la escena mundial que en Francia. En Alemania se traduce y se representa pr¨¢cticamente todo (tienen, claro, m¨¢s de 250 teatros municipales).
Adem¨¢s, existe en Francia un cierto recelo hacia lo hisp¨¢nico, aunque me parece que las cosas empiezan a cambiar. Un recelo que, en definitiva, no es m¨¢s que ignorancia y desprecio, el desprecio del ignorante. Le pondr¨¦ un ejemplo. En 1982, dirig¨ª una versi¨®n de La vida es sue?o en la Com¨¦die Fran?aise y el cr¨ªtico de Le Monde, me parece que era Cournot, dijo que Calder¨®n era un autor "que no pasaba los Pirineos". Y es que en Francia se desconoce a Calder¨®n. Actualmente, en Par¨ªs, lo que est¨¢ de moda es lo alem¨¢n. Usted programa cuatro obras, cuatro autores alemanes y todo el mundo lo encuentra normal¨ªsimo. En cambio, programa usted cuatro autores espa?oles y le dicen que se est¨¢ pasando.
P. Adem¨¢s de las Comedias b¨¢rbaras, ?qu¨¦ programar¨¢ el Th¨¦¨¢tre National de la Colline la pr¨®xima temporada?
R. Dos obras de Roger Planchon, dos m¨¢s de Steven Berkoff (reponemos Greek y estrenamos un nuevo texto), un Bernhard (Almuerzo en casa de Ludivig), una pieza de Svevo, y es probable que estrene algo de Roberto Alt, si no esta temporada la pr¨®xima 1992-93), en la que vamos a estrenar, y espero que le agradar¨¢ la noticia, la versi¨®n francesa de ?Ay, Carmela!, de Jos¨¦ Sanchis Sinisterra, una obra estupenda.
C¨®mo decir esperpento en franc¨¦s
P. ?Cu¨¢les son, pues, adem¨¢s de la oportunidad del momento, los posibles triunfos de su montaje?R. En primer lugar la traducci¨®n, que me parece una traducci¨®n espl¨¦ndida. En segundo lugar, el reparto. Es muy dif¨ªcil encontrar otro mejor Aumont, la Casares, Denise Gence, Maurice Chevit... Menci¨®n especial merece la m¨²sica de Carmelo Bernaola, que es una colaboraci¨®n del Gobierno espa?ol. Adem¨¢s est¨¢ el hecho de que el espect¨¢culo, despu¨¦s de Avi?¨®n y Barcelona, se programe en el Th¨¦¨¢tre National de la Colline, que es un teatro que est¨¢ expresamente consagrado al teatro contempor¨¢neo y actual, con un p¨²blico propio. Quiero decir que no se trata de un capricho, de una iniciativa m¨ªa, sino que la obra se ajusta a la filosof¨ªa de este teatro.
P. ?Es el primer Valle que hace Mar¨ªa Casares?
R. En franc¨¦s, s¨ª, creo que s¨ª. Con Mar¨ªa presentamos Divinas palabras en Buenos Aires, en 1964. De hecho, ese proyecto de realizar una versi¨®n francesa de las Comedias b¨¢rbaras viene de lejos. En 1970 ya le habl¨¦ de ello a Jean Vilar, para estrenarlo en Avi?¨®n, y Vilar se mostr¨® muy entusiasmado. Entonces se trataba de Cara de plata y de un resumen de las otras dos obras. La versi¨®n francesa iba a realizarla precisamente Mar¨ªa Casares -que escribe muy bien. Pero faltaba dinero. El hecho de que Vilar, el hombre del teatro popular, y que ya hab¨ªa apostado por Valle en 1963, se interesase por las Comedias b¨¢rbaras, creo que es otro de esos triunfos que hay que tener en cuenta a la hora de valorar las posibilidades con que cuenta este montaje para situar definitivamente a Valle en el lugar que le corresponde, en la perspectiva del p¨²blico franc¨¦s.
En definitiva, m¨¢s que posibles referencias teatrales -Francia, por desgracia, es el pa¨ªs de las referencias-, nuestro montaje de las Comedias b¨¢rbaras se ha de Imponer al margen de la discusi¨®n te¨®rica -?c¨®mo le explicas a un franc¨¦s lo que es el esperpento?-, del an¨¢lisis universitario, por la sola fuerza del texto, de los personajes, de las im¨¢genes, y creo que podemos lograrlo.
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