Mauri se quedo sin premio tras una larga escapada

El Tour ha terminado, pero nadie quiere irse de vac¨ªo. Un l¨ªder generoso como Indur¨¢in, que vive y deja vivir -en opini¨®n de su director, Ech¨¢varri-, ha decidido abstenerse de intervenir en el llamado Tour de consolaci¨®n. Muchos buscan ahora su oportunidad. Es el momento, pero no es una conquista gratuita. Que se lo digan a Mauri, protagonista de una escapada que dur¨® m¨¢s de 100 kil¨®metros, de los 177 de la etapa, y acab¨® en nada. Su compa?ero de equipo Chozas tuvo m¨¢s ¨¦xito. Un aceler¨®n le permiti¨® superar a Delgado y ahora es d¨¦cimo en la general.

Una victoria de etapa es todav¨ªa un bot¨ªn apetecible: el sovi¨¦tico Konishev se hizo con una mientras LeMond volv¨ªa a despistar a los rumor¨®logos y obten¨ªa m¨¢s de minuto y medio de renta imprevista gracias a un ataque en el ¨²ltimo tramo.Veintid¨®s equipos y 198 corredores tomaron la salida en Ly¨®n hace escasamente tres semanas. No todos los objetivos eran coincidentes, pero cada cual buscaba alg¨²n trozo de tan importante pastel, desde el m¨¢s modesto hasta el m¨¢s afamado, porque el Tour difunde su prestigio por muchos vericuetos. Entre ellos est¨¢n tres equipos espa?oles que buscan en estas fechas alg¨²n ¨¦xito reparador.

No fue extra?o, por tanto, que la etapa se despertara con el madrugador ataque de Melchor Mauri, que tuvo su inicio all¨¢ por el kil¨®metro cuatro cuando se inici¨® el litigio por un puerto de cuarta categor¨ªa, conflicto por el que a¨²n andan ajustando cuentas Chiapucci y Claveyrolat. Mauri se fue con ellos pero con otra intenci¨®n, la de obtener licencia para una. escapada. As¨ª sucedi¨® y su ventaja fue aumentando hasta los ocho minutos entre el desinter¨¦s y la apat¨ªa del pelot¨®n, seg¨²n rezan los comunicados de la organizaci¨®n.

La desgracia de Mauri estuvo en que el pelot¨®n desperez¨® de golpe, acelerado imprevistamente por corredores; del Buckler holand¨¦s y el Gatorade italiano. En apenas 20 kil¨®metros, su ventaja se esfum¨® y termin¨® formando parte de las an¨¦cdotas.

La escapada buena la provocaron Konishev y Richard, con permiso del l¨ªder, autorizaci¨®n que en su momento tuvieron tambi¨¦n corredores como Rooks, Gast¨®n, Chozas y el mism¨ªsimo LeMond, aparentemente interesado en confundir a la prensa de un d¨ªa para otro. Mientras su entorno expone p¨²blicamente que el norteamericano es carne de abandono, el ex l¨ªder del Tour niega la mayor protagonizando escapadas m¨¢s espectaculares que efectivas. Cuando parece francamente recuperado contesta a esa impresi¨®n con un desfallecimiento igualmente sorprendente. La resultante final es b?en sencilla: LeMond, est¨¦ por delante o demabule por detr¨¢s, atrae el foco de la c¨¢mara. No ser¨ªa aventurado pensar que este fen¨®meno tan curioso no responde a otra cosa que a una campa?a publicitaria sabiamente dise?ada. Minuto por minuto, Lemond parece haber disfrutado de mayor despliegue televisivo que el propio Indur¨¢in en esta tercera semana.

Mucha menor suerte tienen corredores de la pasta de Eduardo Chozas, cuya constante actividad corre el peligro de pasar inadvertida. Chozas contest¨® ayer al desfallecimiento del mi¨¦rcoles coloc¨¢ndose en una escapada y rob¨¢ndole el d¨¦cimo puesto de la general al propio Pedro Delgado. Chozas ha buscado la victoria de etapa con gran empe?o, pero no ha tenido suerte.