El guardaespaldas de Noriega promete contar "jugosas an¨¦cdotas" en el juicio
Los esqueletos que guard¨® celosamente en su armario Manuel Antonio Noriega cuando dirig¨ªa los destinos de Panam¨¢ comenzar¨¢n a salir hoy a la luz al iniciarse la segunda semana de su juicio por narcotr¨¢fico. Luis del Cid, ex teniente coronel de la Guardia Nacional paname?a y guardaespaldas de Noriega durante m¨¢s de 25 a?os, ha prometido a los fiscales relatar jugosas an¨¦cdotas de los tratos de su jefe con el cartel de Medell¨ªn. Una de ellas involucra al gobernante cubano Fidel Castro, un posible testigo de la defensa en el sonado juicio contra Noriega.
Seg¨²n el Gobierno norteamericano, en junio de 1984 Fidel Castro sirvi¨® de mediador en una disputa entre Noriega y el cartel de Medell¨ªn provocada por la destrucci¨®n de un laboratorio de coca¨ªna en la selva del Dari¨¦n, en Panam¨¢.Castro, asegura la acusaci¨®n, convoc¨® a Noriega a La Habana y le recomend¨® resolver amistosamente el problema con los narcotraficantes colombianos que hab¨ªan pagado a la guardia paname?a cinco millones de d¨®lares para operar en laboratorios sin obstrucciones de las autoridades. Castro ha negado la historia desde que lleg¨® a conocimiento de Estados Unidos, por primera vez en 1988 por boca del ex diplom¨¢tico paname?o Jos¨¦ Bland¨®n, quien testimoni¨® ante el Congreso sobre la participaci¨®n de su pa¨ªs en el narcotr¨¢fico y lavado de dinero.
Molesto por la acusaci¨®n, Castro se habr¨ªa ofrecido a colaborar con los defensores de Noriega para esclarecer el asunto y no se descarta que el tribunal escuche en un par de meses una declaraci¨®n grabada con la versi¨®n del gobernante cubano.
Los abogados de Noriega, Frank Rubino y Jon May, han evitado confirmar si Castro figura entre sus testigos, pero Rubino admiti¨® recientemente al Miami Herald que este a?o visit¨® en dos oportunidades Cuba para hablar con ¨¦l.
El pasado jueves, Samuel Burstyn, abogado de Luis del Cid, dijo a algunos medios de comunicaci¨®n que Rubino est¨¢ preparando una petici¨®n para introducir las declaraciones de Castro como testimonio, pero no cit¨® la fuente de su informaci¨®n.
El tribunal escuchar¨¢ tambi¨¦n esta semana las declaraciones de Luis del Cid sobre otro escabroso episodio de la carrera de Noriega: su supuesta intervenci¨®n ante la guerrilla colombiana del M - 19 para que dej ara en libertad a una hermana de los Ochoa, l¨ªderes del cartel de Medell¨ªn, secuestrada por el grupo en Colombia. Del Cid comenzaba a tratar el tema el pasado Jueves en su segundo d¨ªa en el estrado cuando la sesi¨®n fue interrumpida abruptamente en atenci¨®n a la emergencia m¨¦dica del padrede uno de los fiscales, Myles Malman, quien sufri¨® un ataque cardiaco.
Del Cild, de 47 a?os, se declar¨® culpable el a?o pasado de cobrar para, Noriega "dinero de las drogas", que le entregaba el piloto palame?o Floyd Carlton C¨¢ceres, uno de los narcotraficantes usados por el cartel de Medell¨ªn para transportar coca¨ªna a Estados Unidos a trav¨¦s de Panam¨¢.
Aunque el panorama para Noriega se presenta desalentador, sus abogados obtuvieron el pasado viernes una peque?a victoria. El juez William Hoeveler resolvi¨® ese d¨ªa aceptar una petici¨®n de Rubino para que se investigue en el tribunal la relaci¨®n de Raymond Takiss, primer abogado de Noriega, con el Gobierno.
Takiss, seg¨²n Rubino, pudo haber perjudicado a su cliente al representarlo como abogado mientras serv¨ªa al mismo tiempo de confidente del Gobierno en un caso no relacionado con el juicio. Takiss renunci¨® a la defensa de Noriega poco despu¨¦s de que el ex dictador paname?o se rindiera en Panam¨¢ ante las tropas norteamericanas que invadieron su pa¨ªs en diciembre de 1989.
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