Sevilla no ha resuelto a¨²n su participaci¨®n en la Expo a seis meses de la inauguraci¨®n

Sevilla a¨²n no tiene resuelta su participaci¨®n en la Expo 92. A seis meses de la inauguraci¨®n, el pabell¨®n "disperso" que dise?ara el duque de Alba, anterior comisario de Sevilla, hace honor a su definici¨®n. Dos de los edificios designados para albergar la representaci¨®n est¨¢n con las obras paralizadas y en estado de abandono (estaci¨®n de Plaza de Armas), o incluso cuestionados por el nuevo comisario, Ignacio Monta?o, en el caso del monasterio de Santa In¨¦s. Monta?o reconoce que existen dificultades financieras, pero tranquiliza: habr¨¢ concursos de saetas, sevillanas y coros rocieros.

La alarma salt¨® en unas declaraciones de Ignacio Monta?o a la Cadena SER: "Si no hubiera exposiciones que montar, el monasterio de Santa In¨¦s se caer¨ªa de entre las sedes oficiales". Con esta afirmaci¨®n, el comisario surgido de las graves diferencias entre Alejandro Rojas-Marcos y Jes¨²s Aguirre, duque de Alba -el primero ces¨® al segundo alegando una cuesti¨®n de obediencia- reconoce dos cuestiones: ni se saben todav¨ªa cu¨¢les ser¨¢n los espacios f¨ªsicos que acoger¨¢n la representaci¨®n de la ciudad sede durante la Expo, ni a¨²n est¨¢n cerradas las actividades anunciadas.Y faltan cinco meses y medio.Fuentes del gobierno municipal consultadas aseguran que el problema viene de atr¨¢s, y que a Ignacio Monta?o le ha tocado la dif¨ªcil tarea de concretar las indefiniciones de Jes¨²s Aguirre. Dicen estas fuentes que el duque vendi¨® la piel antes de matar al oso, esto es, que anunci¨® sus proyectos antes de estar seguro de su viabilidad.

Otras fuentes, no obstante, sostienen que a Monta?o, antiguo colaborador de Manuel Olivencia al frente de la organizaci¨®n de la Expo, corresponde la discutible tarea de "popularizar" la participaci¨®n de la ciudad, y lo demuestran en el anuncio realizado por el comisario de organizar los concursos de sevillanas, saetas y coros rocieros.

"Teatro popular"

Ignacio Monta?o ha declarado recientemente que, dentro de su intenci¨®n de acercar los barrios a la Expo, distribuir¨¢ bustos de poetas andaluces para su colocaci¨®n en diferentes zonas de la ciudad, y que potenciar¨¢ representaciones teatrales de aceptaci¨®n popular. 0 lo que es lo mismo, mientras que el atrevido monumento a Luis Cernuda -inclu¨ªa a un joven desnudo- proyectado por el duque para la plaza de Molviedro se abandona por temor a las protestas de la ciudad tradicional, desde la Comisar¨ªa se resucita el teatro populista de los ?lvarez Quintero. El cuartito de hora contra Ocnos representa el eterno enfrentamiento de las dos caras de la ciudad.