Campa?a en el Polo Sur

A bordo del 'Hesp¨¦rides' ENVIADA ESPECIALLos m¨¢xirnos responsables de la investigaci¨®n en Espa?a quisieron estrenar el esperado y pol¨¦mico 1992 con un acto simb¨®lico: la primera visita de un ministro a la Ant¨¢rtida. La llegada de Javier Solana, titular de Educaci¨®n y Ciencia, acompa?ado de su plana mayor, fue en un principio acogida con una cierta frialdad por los cient¨ªficos espa?oles que se encuentran actualmente a bordo del buque oceanogr¨¢fico Hesp¨¦rides, pero la mayor¨ªa aprueba la visita por el reconocimiento que supone a su labor investigadora.

Isabel Moreno, catedr¨¢tica de Hidrograf¨ªa en Las Palmas, se?ala que, gracias a la Visita, el ministro "conocer¨¢ in situ la investigaci¨®n ant¨¢rtica y c¨®mo estos programas no tienen nada que ver con los habituales", pero no puede disimular su desaprobaci¨®n por la avalancha de "primeros espadas ministeriales y pieriodistas". "Aqu¨ª no tiene que venir nadie, ni pol¨ªticos ni periodistas, al menos en este n¨²mero. El Hesp¨¦rides es un buque ocea- nogr¨¢fico y no de turistas. Lo que tiene que haber es continuidad en el programa de investigaci¨®n y que nos den los medios necesarios. Para esta campa?a, algunos hemos tenido que adelantar fondos de nuestros bolsillo o detraerlos de otros programas", a?ade."Bueno, Narc¨ªs Serra tambi¨¦n se fue al Golfo", afirma divertido, en la b¨¢se Juan Carlos I, el hidroqu¨ªmico de la Polit¨¦cnica de Barcelona Jos¨¦ Jim¨¦nez. En su opini¨®n, el viaje del ministro es "positivo, ya que es una forma de ayudar a la imagen de la investigaci¨®n en la Ant¨¢rtida". M¨¢s esc¨¦ptico se muestra Bartolom¨¦ Amengual, del Instituto Espa?ol de Oceanograf¨ªa de Palma de Mallorca, para quien se trata de "una visita de imagen, aunque sin duda anima". Amengual reconoce que hay investigadores a los que no les ha sentado demasiado bien, "porque hay problemas de infraestructura y esto puede. parecer un despilfarro". M¨¢s contundentes son dos compa?eros suyos del Hesp¨¦rides: "Nos ha sentado fatal. Pensamos que ¨²nicamente ha venido a hacerse la foto, pero no pensamos mejor de los periodistas".

Javier Solana, exultante por su descubrimiento ant¨¢rtico -"Me ha impresionado el color turquesa de los icebergs. Yo soy un poco dalt¨®nico, y siempre me dec¨ªan que eran de un azul intenso, pero hasta que no ves este color no lo puedes creer; es tan impresionante..., es brutal"-, explicaba as¨ª las razones de su visita: "He venido porque me invitaron los cient¨ªficos de la base, y creo que es una forma de darles un apoyo en el a?o que se ha firmado el Protocolo de Madrid. Tambi¨¦n mentir¨ªa si no dijera que es una ilusi¨®n m¨ªa de muchos a?os y que, por tanto, me apetec¨ªa mucho. Adem¨¢s, es el a?o en que hemos inaugurado el buque Hesp¨¦rides, que nos ha supuesto un esfuerzo de varios miles de millones [8.000]". Sobre las cr¨ªticas a su viaje, el ministro respondi¨®: "Si fuera la primera vez que yo visito a cient¨ªficos, se me podr¨ªa decir algo, pero me paso la vida en laboratorios".

Historia del planeta

Para Josefina Castellv¨ª, jefa de la base espa?ola Juan Carlos I, la visita de Solana supone "refrendar el programa de investigaci¨®n ant¨¢rtica ante la comunidad internacional. A partir de ahora todo ser¨¢ m¨¢s sencillo, porque no es lo mismo escribir, leer y hablar de la Ant¨¢rtida que haberla pisado". CastelIv¨ª insiste en que la investigaci¨®n ant¨¢rtica "es esencialmente b¨¢sica para conocer nuestro planeta", porque los estudios de los oc¨¦anos, la atm¨®sfera, los hielos y la geomorfolog¨ªa de estos suelos son fundamentales para "conocer las cosas que han ocurrido.en la historia del planeta y han quedado grabadas en la Ant¨¢rtida".Todos los investigadores destacan la excelente dotaci¨®n cient¨ªfica con que cuenta el Hesp¨¦rides, pero muchos echan de menos "un helic¨®ptero y una lancha de desembarco que permita el transporte de materiales y personas a tierra con mayor seguridad". Ahora, los desembarcos en unas aguas a cero grados, vientos helados y fuertes olas no son precisamente un juego de ni?os. El ¨²ltimo d¨ªa de 1991, dos Zodiac de desinflaron y los periodistas de Canal Plus y Telemadrid, con el agua por la cintura, tuvieron que lanzarse al asalto de una escalera del buque para salir de la apurada situaci¨®n.