Mitterrand cambia el proyecto de la Gran Biblioteca de Francia

Fran?ois Mitterrand ha dado parcialmente la raz¨®n a las numerosas personalidades pol¨ªticas, cient¨ªficas y art¨ªsticas que criticaban con dureza su proyecto de la Gran Biblioteca de Francia. El presidente franc¨¦s acaba de ordenar al arquitecto Dominique Perrault una reducci¨®n de dos plantas en las cuatro torres de la futura biblioteca nacional y la desaparici¨®n de una enorme sala de conferencias. El conjunto ser¨¢ as¨ª m¨¢s bajo y m¨¢s compacto.,En una carta dirigida al ministro de Cultura, Jack Lang, el presidente franc¨¦s acepta que en el proyecto inicial de Perrault, que ¨¦l mismo hab¨ªa apadrinado con entusiasmo, exist¨ªa una importante desproporci¨®n entre la superficie ¨²til y la superficie construida. Perrault hab¨ªa previsto que s¨®lo la mitad de lo construido fuera utilizable como biblioteca. "Hay que disminuir la altura de las torres y aumentar la capacidad de almacenamiento", ordena Mitterrand.

Las cuatro torres de Perrault ser¨¢n ligeramente achatadas, al perder 7 metros de altura de los 86 inicialmente previstos. El joven arquitecto franc¨¦s ve as¨ª desaparecer nuevos elementos de su proyecto inicial. La posibilidad de que la luz del sol estropeara las obras almacenadas en las cuatro torres ya le hab¨ªa obligado a renunciar casi por completo a la idea de transparencia.

Estos sucesivos recortes al ¨²ltimo gran proyecto arquitect¨®nico de Mitterrand coinciden con el ambiente die fin de reinado que vive Francia. La gran popularidad del presidente en el ¨²ltimo tramo de los a?os ochenta hab¨ªa logrado acallar las protestas despertadas por obras como la pir¨¢mide acristalada del Louvre o el Arco de la Defensa. Hoy, esas obras son generalmente bien vistas por los parisienses, pero, en cambio, la debilidad pol¨ªtica de Mitterrand presta alas a los cr¨ªticos de la Gran Biblioteca.