Li Peng advierte que China no tolerar¨¢ una democracia de tipo Occidental

El primer ministro chino, Li Peng, declar¨® ayer ante el pleno de la Asamblea Popular Nacional que la apertura econ¨®mica proseguir¨¢ con ambiciosas reformas, pero advirti¨® que no se tolerar¨¢n iniciativas encaminadas a promover en China una democracia de tipo occidental. Li previno contra un posible proceso inflacionario y subray¨® tambi¨¦n que las actividades delictivas, cuyos l¨ªmites y clasificaci¨®n no precis¨®, deben ser combatidas "sin compasi¨®n ni clemencia". "En caso contrario", asegur¨®, "podemos pagarlo muy caro".

Cerca de 5.000 personas, entre diputados, miembros de la Conferencia Consultiva del Partido Comunista, diplom¨¢ticos, periodistas y miembros de una banda militar, asistieron a la ceremonia de apertura de la s¨¦ptima edici¨®n de la Asamblea, que se desarroll¨® en el Gran Palacio del Pueblo, en una de cuyas salas se levant¨® un dispensario para atender las necesidades m¨¦dicas de los diputados m¨¢s ancianos. Deng Xiaoping no asisti¨® al acto en el que el jefe del Gobierno pronunci¨® un discurso, de cerca de dos horas de duraci¨®n, considerado por los observadores de contenido m¨¢s conservador que el de las recientes declaraciones efectuadas por el todav¨ªa m¨¢ximo dirigente chino. Hace pocos d¨ªas el anciano l¨ªder inst¨® a estrechar la vigilancia sobre "la izquierda" m¨¢s que sobre "la derecha".Flanqueado por los m¨¢ximos dirigentes del partido y del Estado, el primer ministro subray¨® la necesidad de "mantenerse alerta frente a las ideas de liberalizaci¨®n burguesa, ponerse en guardia tan pronto como aparezcan sus primeros s¨ªntomas y de ninguna manera permitir que se desborden, so pena de enfrentar grav¨ªsimas consecuencias". La intervenci¨®n del gobernante estuvo dedicada fundamentalmente a enumerar los resultados y objetivos de una reforma econ¨®mica que ha funcionado bien y que este a?o intentar¨¢ un crecimiento del 6% contra el 7% logrado en el ejercicio anterior. De acuerdo con Li Peng, quien rechaz¨® cualquier presi¨®n internacional en el tema de los derechos humanos, la estabilidad social y pol¨ªtica son indispensables para continuar con las reformas, que ahora incidir¨¢n en el sector agr¨ªcola y en la reconversi¨®n de las grandes y medianas empresas p¨²blicas.

"En 1991, los mercados estuvieron bien abastecidos y el pueblo vivi¨® feliz y tranquilo. (...) Donde hay orden hay prosperidad y donde hay desorden hay decadencia", manifest¨®. "S¨®lo profundizando sin cesar la reforma", agreg¨®, "desarrollando incesantemente la econom¨ªa y elevando sin pausa el nivel de vida del pueblo es posible sentar las bases para un largo periodo de orden y tranquilidad sociales y mostrar a plenitud la superioridad del sistema socialista". El primer ministro chino, en el apartado dedicado a las relaciones internacionales, declar¨® que Pek¨ªn defender¨¢ sus actuales lazos de amistad con Corea del Norte y estim¨® que han mejorado las relaciones chino-norteamericanas.

Li Peng, visto como uno de los principales promotores del env¨ªo del Ej¨¦rcito para reprimir las manifestaciones de 1989 en la plaza de Tiananmen, anim¨® el regreso de los estudiantes chinos exiliados en el extranjero "para que tomen parte en la modernizaci¨®n del pa¨ªs". "Sea cual sea la posici¨®n pol¨ªtica que hayan asumido en el pasado, les daremos la bienvenida". Seg¨²n el Gobierno chino, 87.000 estudiantes viajaron a un total de 76 pa¨ªses a finales de los a?os setenta para cursos de mejoramiento y regresaron 40.000. Fuentes occidentales aseguraron por su parte que se fueron 150.000, de los que no han vuelto las dos terceras partes. Varios miles de j¨®venes, en su mayor parte universitarios, abandonaron China despu¨¦s de Tiananmen.