Gobierno y Parlamento ruso buscan el compromiso sobre el recorte de poderes a Yeltsin

Representantes del Gobierno ruso, dirigido por Bor¨ªs Yeltsin, en franca rebeli¨®n contra las medidas adoptadas el s¨¢bado por la noche por el Congreso de los Diputados del Pueblo, y miembros del presidium del Soviet Supremo de, la Federaci¨®n Rusa y de los grupos parlamentarios se reunieron ayer en Mosc¨² para intentar poner fin a su agria disputa. El Parlamento dio un plazo de tres meses al presidente de la principal rep¨²blica de la CEI para que renuncie a sus poderes excepcionales y al puesto de jefe del Gabinete. El viceprimer ministro y padre de la reforma econ¨®mica, Yegor Gaidar, dijo que la reuni¨®n de ayer fue "constructiva" pero que el Gobierno en pleno dimitir¨¢ si se intenta paralizar la reforma.

El Gabinete, lo que vale tanto como decir Yeltsin, sostiene que los poderes excepcionales son imprescindibles para que la reforma econ¨®mica obtenga resultados positivos. Otro viceprimer ministro, Alexandr Shojin, asegur¨® el s¨¢bado por la noche, ante una multitud reunida en la plaza Roja de Mosc¨² en apoyo de la pol¨ªtica del presidente, que el Gobierno lanzar¨¢ hoy un llamamiento al Congreso para que revise "algunas de las disposiciones" adoptadas el s¨¢bado. "Queremos", indic¨®, "que los sacrificios que ha hecho el pueblo hasta ahora en aras de la reforma no sean en vano".En medios pol¨ªticos moscovitas se estima que lo que se aproxima a un ultim¨¢tum promovido por el agresivo y joven equipo reformista se inscribe en una estrategia destinada a desembarazarse de un Congreso elegido hace dos a?os bajo el r¨¦gimen comunista.

La resoluci¨®n del Congreso, aprobada tras largos debates, con la introducci¨®n de 311 enmiendas, mantiene a Yeltsin tan s¨®lo por tres meses los poderes extraordinarios que le permiten gobernar por decreto y compaginar la jefatura del Estado y del Gobierno, y le exige que, al cumplir ese plazo, presente un proyecto de ley del Gobierno y las candidaturas del jefe y de los componentes de ¨¦ste.

Los frutos del cambio

Yeltsin no se opon¨ªa a tales medidas, pero pretend¨ªa retrasar hasta diciembre su entrada en vigor para dar tiempo a que sus medidas reformistas diesen los primeros frutos.

Yegor Gaidar y su equipo interpretaron la limitaci¨®n como un recorte a su capacidad de realizar la reestructuraci¨®n que consideran imprescindible para que Rusia salga del caos econ¨®mico subsiguiente al desmantelamiento total de las estructuras de la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica.

La lucha de fondo que se desarrolla en el Congreso est¨¢ directamente relacionada con lo que se supone que es el principal objetivo de la reuni¨®n: otorgar a Rusia una Constituci¨®n que sustituya a la comunista. Pero ?de qu¨¦ tipo?: ?una presidencialista, como quiere Yeltsin, o una parlamentaria, como quiere la mayor¨ªa de los diputados? Muchos observadores estiman que la nueva Carta Magna no saldr¨¢ de esta sesi¨®n parlamentaria, sino que quedar¨¢ para m¨¢s adelante si Yeltsin y los suyos consiguen ma?ana que el macroparlamento revise su decisi¨®n. El presidente de la C¨¢mara, Rusl¨¢n Jasbul¨¢tov, dej¨® abierta la posibilidad de un acuerdo, al matizar que la resoluci¨®n estaba "aprobada" pero que no se firmar¨ªa hasta hoy para que todos los diputados tengan ocasi¨®n de estudiar detalladamente las m¨²ltiples enmiendas introducidas.

Nadie pudo confirmar si a la reuni¨®n conjunta de ayer entre diversos miembros del Gobierno, del presidium y de los grupos parlamentarios asisti¨® el propio Yeltsin. Si lo hicieron el secretario de Estado, Guennadi Burbulis, el consejero presidencial Sergu¨¦i Chakhrai, Jasbul¨¢tov y Gaidar.

En otro orden de cosas, la situaci¨®n en Nagorni Karabaj (enclave armenio en territorio de Azerbaiy¨¢n) se ha agravado en los ¨²ltimos d¨ªas. M¨¢s de 160 personas murieron el pasado fin de semana como consecuencia de choques entre fuerzas azerbaiyanas y de las milicias de autodefensa armenias, seg¨²n fuentes de Yerev¨¢n. Los combates m¨¢s violentos se desarrollaron el s¨¢bado en la poblaci¨®n armenia de Maraga. La acci¨®n conjunta de la artiller¨ªa y de veh¨ªculos blindados azer¨ªes caus¨® al menos 45 muertos entre la poblaci¨®n civil, incluyendo a 35 mujeres, ancianos y ni?os. Supuestamente, 70 de los atacantes perdieron tambi¨¦n la vida.

No muy lejos, en Osetia del Sur (al norte de Georgia), tres personas murieron y otras 12 resultaron heridas como resultado de incursiones en varias aldeas de partidarios de Zviad Gamsajurdia, el presidente de la rep¨²blica forzado a dejar su puesto y huir el 6 de enero.