Estreno triunfal en Holanda de la ?pera "Vida con un idiota", del compositor ruso Alfred Schnittke

Ovaciones, abrazos y flores sobre el escenario y continuas llamadas de los espectadores al compositor, el m¨²sico ruso Alfred Schnittke, para que compareciera, saludaron la noche del pasado lunes en Amsterdam el estreno mundial de la ¨®pera Vida con un idiota. El p¨²blico que abarrotaba el Muzlektheater de la capital holandesa se rindi¨® ante una ¨¢cida par¨¢bola en dos actos de la vida en la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica escrita por Viktor Erofiev y dirigida y en parte interpretada por un feliz Mtsislav Rostrop¨®vich. El entusiasmo y determinaci¨®n del violonchelista, que permaneci¨® 12 a?os fuera de su patria y apoy¨® personalmente a las fuerzas contrarias al golpe de Estado contra Gorbachov, ha resultado esencial para un proyecto que ha logrado reunir al m¨¢s selecto grupo de artistas rusos vivos.En el mismo aparecen tambi¨¦n el director de escena Bor¨ªs Pokrovsky y el escen¨®grafo Bya Kab¨¢kov. Ellos cierran el quinteto que ha hecho posible la culminaci¨®n de una ¨®pera que a punto estuvo de malograrse a causa del derrame cerebral sufrido por el compositor. Fue en 1991 cuando Schrtittke llevaba compuestas 80 p¨¢ginas de la partitura. Su recuperaci¨®n se vio luego favorecida por el apoyo de la fundaci¨®n holandesa Eduard van Beinum. Pero sobre todo fue animado por el propio Rostrop¨®vich, que le visit¨® en Hamburgo y colabor¨® con ¨¦l en la versi¨®n definitiva de la pieza. En esta labor y al frente de la Filarm¨®nica -de Rotterdam, que interpreta Vida con un idiota, el violonchelista reconoce haber pasado los mejores d¨ªas de mi estancia en Occidente. Porque Schnittke es, tras Shostak¨®vich y Prok¨®fiev, el mayor compositor del siglo XXII.

En la ¨®pera, el tenor Howard Haskin interpreta a Vova, el idiota. Antes de los primeros compases, lleva del brazo a Rostrop¨®vich hasta su atril de director. El m¨²sico ruso aparece luego como pianista en una orquestina de caf¨¦ e interpreta tambi¨¦n dos solos con su propio instrumento. Vova, maquillado como si fuera Lenin, invadir¨¢ luego la intimidad del matrimonio protagonista. Yo, el marido (Dale Duesing, bar¨ªtono), y Esposa, su mujer (Teresa Ringhoiz, soprano), han sido castigados por una culpa no explicada y deben compartir su casa y su vida con un idiota. El absurdo de la situaci¨®n deviene en tragedia despu¨¦s de que Vova se haya adue?ado de sus voluntades, mantenido relaciones con ambos y cortado la cabeza de ella con unas tijeras de podar fabricadas en la extinta Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana. En la ¨²ltima escena, Yo acaba en el manicomio de donde sac¨® al idiota y los tres cantan una oda a la revoluci¨®n. "Oigo el canto del cisne de mi revoluci¨®n", gime Yo en un final abocado al delirio de no saber quien es el verdadero idiota. Viktor Erofiev escribi¨® o en 1980 la novela que da t¨ªtulo a la ¨®pera. Expulsado en dos ocasines de la Uni¨®n de Escritores sovi¨¦ticos, fue rehabilitado a fin miles de la misma d¨¦cada. La idea de transformar su historia en su libreto para ¨®pera surgi¨® en curso de una velada literaria a a que tambi¨¦n asisti¨® Schnittl Eran los principios de la per¨¦troika y el compositor vio enseguida las posibilidades musical del texto. Luego llenar¨ªa la par e tura de pasajes en recuerdo , Shostak¨®vich y Stravinski y rel a rencias a sones populares.

Para sobrevivir en su pw a donde fue boicoteado por el ministerio de Cultura y la Uni¨®n, Compositores, Alfred Sclinittke ha escrito m¨²sica para pel¨ªculas y teatro.