Los ministros de Cultura de la CE contin¨²an divididos sobre la circulaci¨®n de obras de arte
Espa?a se presenta como palad¨ªn de los proteccionistas
Los ministros de Cultura de la CE echaron ayer en Bruselas el primer pulso sobre los proyectos de directiva y reglamento para impedir la exportaci¨®n il¨ªcita de obras del patrimonio hist¨®rico art¨ªstico. Los Doce aceptan limitar la libre circulaci¨®n de bienes culturales porque no son una simple mercanc¨ªa, pero siguen divididos sobre el alcance de las normas de control que puede imponer cada Estado miembro. Espa?a se presenta como el palad¨ªn de los proteccionistas, y el Reino Unido como el de los liberalizadores.
La divisi¨®n de intereses entre los Doce responde a un sur de la Comunidad, rico en patrimonio hist¨®rico art¨ªstico, frente a un norte pobre en obras de arte pero con poderosos marchantes dispuestos a adquirirlas.El enfrentamiento obedece tambi¨¦n a una situaci¨®n legislativa muy dispar, agravada en el caso de Espa?a, Italia, Francia, Grecia y Portugal por la dificultad de elaborar inventarios completos de los millones de obras de arte existentes y de las que faltan por localizar.
El Gobierno espa?ol fue quien inici¨® la batalla en 1989 para hacer prevalecer que el arte y la cultura son campos al mar gen del mercado ¨²nico y, por tanto, la riqueza de la CE es la diversidad o la suma de la que in dividualmente tiene cada uno de los Doce. Ante la presi¨®n espa?ola, la Comisi¨®n Europea aprob¨® el pasado 15 de enero sendas propuestas de directiva y regla mento que regular¨¢n, a partir del pr¨®ximo 1 de enero, los intercambios de patrimonio entre los Estados miembros y unificar¨¢n las condiciones de exportaci¨®n hacia pa¨ªses terceros.
La de ayer fue la primera oca si¨®n en que los ministros de Cultura debatieron los nuevos pro yectos. Las posturas est¨¢n lejos de un acuerdo, aunque "hace falta sentar las bases del sistema con urgencia", seg¨²n el ministro Sol¨¦ Tura. Espa?a figura entre los pa¨ªses que no quieren renunciar a la competencia nacional en esta materia a la hora de establecer una definici¨®n com¨²n.
Ventas il¨ªcitas
Cada Estado podr¨¢ imponer un r¨¦gimen de autorizaciones a la exportaci¨®n, incluso si trata a otro pa¨ªs de los Doce que integrar¨¢n el mercado ¨²nico de 1993. El principio del sistema se basa en el derecho de recuperar una obra vendida ¨ªlicitamente. El plazo para la reclamaci¨®n, seg¨²n la propuesta, prescribir¨¢ a los cinco o seis a?os de detectada la venta o, como m¨¢ximo, a los 30 a?os de realizada la transacci¨®n. El Reino Unido quiere rebajar esos per¨ªodos a un mes y seis a?os, respectivamente.
En el derecho a una "indemnizaci¨®n justa" tambi¨¦n surgieron las diferencias, pues Gran Breta?a, Holanda, B¨¦lgica, Luxemburgo y Alemania, se niegan a invertir la carga de la prueba, en el sentido de que es el Estado reclamante quien debe probar que la adquisici¨®n no se hizo de buena fe. Espa?a, Grecia, Francia, Portugal e Italia pretenden que es el comprador quien debe demostrarlo y prevalecer as¨ª en esta materia la jurisprudencia sobre la recuperaci¨®n de cosas robadas.
El Estado que recupera una obra se ver¨¢ obligado a indemnizar, aunque podr¨¢ exigir luego ese dinero a quien realiz¨® la venta il¨ªcita. Sin embargo, frente a la tesis del precio equitativo, el Reino Unido quiere imponer la cotizaci¨®n del mercado. El ¨¢mbito de aplicaci¨®n es otro frente abierto. Los criterios de antig¨¹edad y especialmente los del valor econ¨®mico del bien exportado son objeto de contestaci¨®n. Los baremos van desde una antig¨¹edad m¨ªnima de 100 a?os para los descubrimientos arqueol¨®gicos a al menos 975.000 pesetas de cotizaci¨®n para grabados, estampas y litograf¨ªas. Los libros sometidos a control tendr¨¢n que tener una antig¨¹edad de un siglo, en lugar de dos como estaba previsto inicialmente. En cuanto a cuadros y pinturas, siempre de artistas muertos, la autorizaci¨®n prev¨ªa para la exportaci¨®n s¨®lo se exigir¨¢ a los de valor superior a 9,75 millones de pesetas. El Ministerio de Cultura no est¨¢ de acuerdo con estos criterios mercantiles.
Babelia
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