Mario Maya, trofeo para la tradici¨®n flamenca

El premio nacional de danza que otorga anualmente el Ministerio de Cultura ha reca¨ªdo este a?o en Mario Maya (C¨®rdoba, 23 de octubre de 1946), y la concesi¨®n le sorprendi¨® camino del aeropuerto sevillano, donde se embarc¨® ayer hacia Jap¨®n para una larga gira art¨ªstica acompa?ado de su grupo.Maya, con su figura magra y su mata de rizos negros, se cri¨® en el barrio del Sacromonte de Granada, y all¨ª adquiri¨® de primera mano ese car¨¢cter austero de su danza, concentrado y por momentos excesivo que le ha definido y diferenciado.

R¨¢pido en sus zapateados, felino y el¨¢stico en sus desplazamientos sobre el escenario, este notable artista supo elaborarse una manera particular de abordar los bailes tradicionales del flamenco y, desde esa postura, entrar en el terreno experimental asumiendo los riesgos de la mezcla de lenguajes de danza. Siempre ha habido elogios para sus sobrios movimientos de brazos y manos.

Fiel a sus or¨ªgenes, los motivos de su trabajo han girado en tomo al mundo gitano, la marginaci¨®n y las legendarias tragedias de su entorno, representando un perfil del bailaor-bailar¨ªn que como El G¨¹ito y Antonio Gades, entre otras figuras de su dotada generaci¨®n, describieron un id¨¦ntico c¨ªrculo de profesionalizaci¨®n: los tablaos de Sevilla y Madrid primero, y despu¨¦s la compa?¨ªa de Pilar L¨®pez, verdadera fragua de talentos desde los a?os cuarenta, donde depur¨® su t¨¦cnica personal y entr¨® en los secretos del ballet flamenco y la danza esc¨¦nica espa?ola de tradici¨®n.

Desde los a?os setenta, Mario Maya ha tenido su propia agrupaci¨®n, con la que ha hecho giras internacionales y algunos montajes memorables como Ceremonial (1974) Kamelamos Nakelar (1976) y Ay, jondo (1977). Su etapa m¨¢s fruct¨ªfera ha sido la d¨¦cada de los ochenta, con Amargo (1984), basado en el texto hom¨®nimo de Federico Garc¨ªa Lorca; El amor brujo (1987), con la m¨²sica de Manuel de Falla, y Tiempos, amor y muerte (1988), donde intent¨® un acercamiento a los modos de la danza teatro. Su ¨²ltima obra de creaci¨®n coreogr¨¢fica, Flamencos de la Trinidad (1991), ha sido un encargo para una compa?¨ªa murciana.

Una de sus apariciones estelares en el extranjero fue en el Festival de Danza Espa?ola de Reggio Emilia en la gala Una noche de encuentros (1988), donde interpret¨® un solo con su particular estilo junto a otras estrellas espa?olas. Maya es uno de los artistas del baile teatral flamenco que m¨¢s han visto reconocido su trabajo con la medalla de plata de Andaluc¨ªa (1986) y el Giraldillo del Baile de la Segunda Bienal Sevillana de Arte Flamenco (1980).