Blancas contra negras en un pa¨ªs en guerra

El retorno del ajedrecista estadounidense Bobby Fischer, tras un retiro de 20 a?os, ha supuesto un escalofr¨ªo para el mundo del ajedrez. Fischer, se enfrentar¨¢ a partir del pr¨®ximo dos de septiembre al ex sovi¨¦tico Bor¨ªs Spasski, en un balneario de Sveti Stefan (Montenegro), isla alejada de los combates que se suceden en la antigua Yugoslavia. El intrigante pasado de ambos ajedrecistas a?ade expectaci¨®n a este desafio, verdadera revancha de los que fueron utilizados como dos s¨ªmbolos de la pol¨ªtica de bloques durante los a?os de la guerra fr¨ªa.

Boby Fischer, de 49 a?os, se convirti¨® en un h¨¦roe nacional en 1972, cuando arrebat¨® el t¨ªtulo mundial a Bor¨ªs Spasski de 55 a?os, en plena guerra fr¨ªa. El duelo fue considerado un combate entre EE UU y la URSS. Tras su derrota, Spasski negoci¨® la salida de su pa¨ªs y ahora tiene la nacionalidad francesa, Fischer desapareci¨®, sin siquiera defender su t¨ªtulo, en 1975.El pasado mes. de julio, el peri¨®dico ingl¨¦s The Guardian calific¨® a Fischer como un hombre "abandonado en su forma de vestir, gordo y barbudo", despu¨¦s de la difusi¨®n de unas im¨¢genes en su apartamento de Los ?ngeles, emitidas por una cadena de televisi¨®n de EE UU. Sus antiguos amigos le describen como un solitario, encerrado en su casa y rodeado de libros de ajedrez, que pasa el tiempo bebiendo zumos, vitaminas y jugando contra ¨¦l mismo.

El retorno de Fisher tiene el precio de cinco millones de d¨®lares (m¨¢s de 450 millones de pesetas), aunque. colaboradores del promotor del torneo, el financiero yugoslavo Jezd¨ªmir Vas¨ªlevich, aseguran que el jugador no reaparece por dinero: "El dinero nunca ha sido un problema en su vida; lo ¨²nico que le interesa es el reconocimiento del ajedrez mundial".

Entre las especulaciones sobre su vuelta, los colaboradores de Vas¨ªlevich se?alan su deseode asegurarse "una plaza en la historia del ajedrez" tras la muerte de Mija¨ªl Tal. El ajedrecista brit¨¢nico Raymond Keene asegura que la muerte de Tal produjo una gran conmoci¨®n en Fisher. "Era uno de los pocos que consiguieron ganarle y ahora no puede despreciar la oportunidad de reaparecer", explic¨® Keene.

Fisher considera a Spasski un rival asequible, y al torneo, una oportunidad para volver a casa millonario y aumentar la cotizaci¨®n de su nombre.